Cuernavaca.- Los Atlas Estatal y Municipales deben ser actualizados durante los primeros seis meses de cada administración y en ellos se establecen los diferentes niveles de peligro y riesgo de todos los fenómenos. Pese a ello, hasta ahora solo 14 de 36 municipios cuentan con este instrumento y en muchos casos no está actualizado.
Un atlas de riesgo es un sistema que integra información sobre fenómenos perturbadores a los que está expuesta una comunidad y su entorno. Su estructura está diseñada como una plataforma informática apoyada en sistemas de información geográfica y bases de datos.
“Esta información nos permite conocer la vulnerabilidad que tiene cada área, el riesgo en el que se encuentra la población y los niveles de peligro que pudieran establecerse en cada zona, lo que contribuye a delimitar áreas en las no debe estar el ser humano para no exponerse al peligro y no generar un riesgo”, aseguró Enrique Clement Gallardo, titular de la Coordinación Estatal de Protección Civil (CEPC).
La Ley Estatal de Protección Civil, en su Capítulo V, trata sobre el Atlas Estatal de Riesgos y establece que tanto el Gobierno del Estado como los Municipios deben contar con este instrumento el cual debe ser actualizado durante los primeros seis meses de cada administración, sin embargo, en este momento solo 14 ayuntamientos tienen un Atlas y son Cuernavaca, Huitzilac, Totolapan, Temoac, Tetela del Volcán, Cuautla, Jiutepec, Ocuituco, Tetecala, Tlaltizapán, Tlayacapan, Yautepec, Temixco y Jojutla, aunque no todos están actualizados.
El artículo 107 de la Ley Estatal de PC establece que “los Atlas Estatal y Municipal de Riesgos, deberán establecer los diferentes niveles de peligro y riesgos, para todos los fenómenos que influyan en las distintas zonas. Dichos instrumentos deberán ser tomados en consideración por las autoridades competentes, para la autorización o no de cualquier tipo de construcciones, obras de infraestructura o asentamientos humanos”.
De acuerdo al artículo 102 es considerado como delito grave permitir la construcción, edificación, realización de obras de infraestructura y asentamientos humanos que se lleven a cabo en una zona considerada como de riesgo.
El estado de Morelos se encuentra en una zona en la que se pueden registrar todos los tipos de peligros naturales y tecnológicos, con excepción de los tsunamis, por ello la importancia de trabajar en la planeación y encaminar en el desarrollo urbano sin exponer a la población.
Clement Gallardo lanzó un llamado a todos los presidentes municipales, en especial, a los que no tienen su Atlas de Riesgos, a cumplir con este instrumento para no poner en riesgo a la población, ya que año con año se presentan con mayor frecuencia desastres naturales de mayor intensidad.
Por: Marcela García marcela.garcia@diariodemorelos.com