Licenciado en Derecho y Ciencias Sociales, participó en la creación de la UAEM, trabajó en Altos Hornos de México, periodista, director del Penal, director jurídico de la procuraduría, de la policía judicial, Ministerio Público fue José Jesús Cepeda Ayala quien nació en Monterrey el 6 de marzo de 1933.
Sus hermanos y él cazaban conejos y liebres con resortera antes de ir a nadar al río Pesquería. Su mamá les cocinaba carne asada, cabrito, las tortillas de harina y algunas sodas para cuando comían en el campo. Todos sus hermanos fueron a la escuela, menos los dos pequeños que fallecieron a los tres años y al año de edad. La mayoría de ellos son maestros de escuela. El papá de Pepe, como lo conocen todos, fue José Baldomero Cepeda, quien era comerciante en café y su mamá, Rafaela Ayala Martínez trabajaba en un laboratorio de artículos farmacéuticos y perfumería. Después fue ama de casa y procrearon 14 hijos: Guadalupe, José, Juanita, Concepción, Antonio, Belem, Alejandra, Rafael, Rubén, Ramona, Tomas, Teresita, Antonio y María de la Luz. Todos sus hermanos fueron a la escuela, con excepción de los dos menores que fallecieron a los tres y al año de nacidos.
Cuando vivía en Monclova Coahuila Estudió la primaria en su ciudad natal, la secundaria en Monclova, la preparatoria en la Justo Sierra en el turno vespertino de la Ciudad de México. Trabajaba en Altos Hornos de México (AMSA) y talleres satélites de la empresa; entró como tornero mecánico y a la vez era corresponsal del periódico “El Sol del Norte” de la compañía García Valseca y del periódico “El Porvenir”. De ahí se fue a la Ciudad de México a estudiar la preparatoria. Y ahí también trabajó en el Penal de Santa Martha Acatlipa.
Cuando estaba en la preparatoria se casó con Olga María Aguilar Victao y procrearon tres hijos: José, Rafael y Yedid. Su hijo José falleció a los cincuenta y un años de una seria complicación y su esposa Lourdes Mendoza falleció cuatro años después, dejando a sus dos niñas, quienes ya están felizmente casadas, dándole dos hermosas nietecitas: Lourdes Lisbet y Mariana Rafaela. Su hijo Rafael, quien es licenciado en derecho, le gusta mucho la política en la que siempre está inmiscuido. Él es padre de tres hijos.
Sus padres vivían en Monterrey y en Monclova, viajaban a los ranchos cercanos a Nuevo León, donde tenían familiares. Se acuerdan que pasaban al pueblito de Apodaca, Escobedo y San Nicolás, que eran sólo unas rancherías y hoy en día se han vuelto grandes e importantes, donde hasta tienen sus propias universidades. Y ahora hasta el aeropuerto de Monterrey está en Escobedo dice sonriente.
El primer año de Derecho lo cursó en la UNAM y al llegar a Cuernavaca se inscribió en la Escuela de Derecho del Estado de Morelos, frente al Parque Revolución, cursando la licenciatura en Derecho y Ciencias Sociales y se recibió siendo gobernador de Morelos el Coronel Norberto López Avelar.
El director de la escuela le comunicó a la comunidad de la misma que tenían que dejar el local por no tener un contrato de arrendamiento; se reunieron los estudiantes y en esa junta se llegó a la idea de construir un local propio para la Universidad del Estado.
Otilio Rivera Almada y Raúl Iragorri Montoya ofrecieron los materiales para dicha construcción, el estudiantado ofreció su trabajo para la edificación de la nueva Universidad.
A la salida se hicieron comentarios diversos y un grupo de estudiantes que participaron, entre ellos: Antonio Tajonar Cifuentes, Uriel Carmona Sánchez, Brigido Torres Castro, junto con José Cepeda Ayala, comentaron que en el tercer informe de gobierno del coronel López Avelar cedió en usufructo el palacio de gobierno en construcción que dejó inconcluso el gobernador anterior Rodolfo López de Nava, al Instituto de Educación Superior del Estado de Morelos, para que dicho inmueble fuese convertido en la Universidad del Estado de Morelos, por lo que los universitarios tenían la posesión legal del edificio en construcción.
Invitados por Toño Tajonar los cuatro alumnos mencionados fueron a desayunar a su casa, donde acordaron elaborar un manifiesto invitando a la comunidad universitaria a desfilar por las calles del centro de Cuernavaca, cargando pupitres y tomando posesión de dicho edificio de la parte poniente de la Plaza de Armas, que le pertenecía. Ese manifiesto fue pegado en casi todas las paredes del centro de Cuernavaca y en varias de las escuelas locales.
Para esas fechas, don Emilio Riva Palacio ya era gobernador electo y dentro de sus planes de obra a realizar, era terminar ese edificio que sería la sede del Gobierno del Estado de Morelos en lugar del Palacio de Cortés el cual era el Palacio de Gobierno.
Como gobernador en funciones, don Emilio se presentó en la escuela de Derecho para mostrarle al rector y a los estudiantes, la maqueta de la nueva universidad, ya que el Colegio Militar había cedido los terrenos de Chamilpa para el uso de la Universidad, al haber este, escogido un espacio para el Colegio cerca de la Ciudad de México. El citado manifiesto sirvió como detonador para que esto sucediera, siendo Secretario de Gobierno don Fausto Galván Campos.
Ya en Cuernavaca trabajó como subdirector en el periódico “El Imparcial”, siendo el director, don Alfonso Ávila Tirado. Ahí era redactor y reportero y de lo que se necesitara, pues sólo eran ellos dos quienes manejaban todo el periódico.
Trabajó con don Ignacio de la Hoya como Gerente de su Diario con quien hacía todo el periódico. Después se fue a trabajar al “Diario La Voz” con don Pepe Gutiérrez como gerente y articulista.
Siendo gobernador don Felipe Rivera Crespo, Pepe fue nombrado Agente del Ministerio Público siendo procurador don Teodoro Lavín González. Durante el sexenio de don Armando León Bejarano lo nombraron Jefe de la Defensoría de Oficio del Estado, después subdirector del Cereso y luego Director Interino.
Cuando el licenciado José Castillo Pombro, presidente municipal, lo nombró Director de Mercados, el gobernador era don Lauro Ortega Martínez y pepe fue a trabajar a la Secretaría de Tranquilidad Social, al mando de Fernando Román Lugo y a los tres meses, Director Jurídico de la mima Secretaría.
Con don Antonio Riva Palacio fue enviado como Director Jurídico de la Policía Judicial y luego Director de la Policía Judicial y más tarde, Director Jurídico.
El Gobernador Antonio Riva palacio envió a Pepe a Europa junto con la Interpol, a la localización del fugitivo cuautlense Ramón García Gómez quien había vivido en España y Francia y se creía que estaba en aquellos países.
Fue Delegado de Circuito de la Procuraduría en la zona de Yautepec, Cuautla y Jojutla; Director de Averiguaciones Previas con el Procurador Castillo Pombo, Secretario del H. Ayuntamiento de Yautepec y Asesor Jurídico.
Con una carrera y una vida plena, don José Jesús Cepeda Ayala está jubilado por el Gobierno del Estado de Morelos, y ahora se dedica a la siembra del aguacate en Santa María Ahuacatitlán, siendo un hombre respetado y querido por la ciudadanía de Cuernavaca.
Por: Rafael Benabib / rafaelbenabib@hotmail.com