CUERNAVACA, MORELOS.- Restauranteros han preferido perder a su clientela fumadora, que enfrentar las altas multas por violar la Ley Antitabaco.
El consejero nacional de la Cámara Nacional de la Industria Restaurantera y Alimentos Condimentados (Canirac), Ángel Adame Jiménez, dijo ayer que a cinco años de que entraron en vigor la nueva Ley de Protección contra la Exposición Frente al Humo del Tabaco y su reglamento, la industria restaurantera ha perdido entre 10 y 12 por ciento de su clientela.
Lo anterior, debido a que la prohibición total acerca del consumo de cigarro en espacios cerrados ha alejado a varios consumidores.
Sin embargo, dijo que los empresarios de la industria restaurantera han preferido eso, a tener que pagar las costosas multas por incumplir las disposiciones que establece la referida ley.
Las multas varían entre 18 y hasta 30 mil pesos, y por lo mismo dijo que la mayoría de los dueños de los negocios, por lo menos los que están agremiados a la Canirac, prefieren acatar la prohibición, sobre todo aquellos que no estuvieron ni están en condiciones de hacer modificaciones físicas a los espacios.
Adame Jiménez reconoció que la aplicación de la llamada popularmente Ley Antitabaco ha servido para generar conciencia entre la población fumadora.
Y, si bien dijo que los negocios registraron –o registran- una disminución de su clientela, también es cierto que los consumidores aceptan cada vez más que no pueden fumar en espacios cerrados.
No desean hacerse acreedores a multas
La Ley de Protección contra la Exposición Frente al Humo del Tabaco fue aprobada a finales de 2011 por el Congreso del Estado y entró en vigor en junio de 2012; su reglamento fue aprobado y entró en vigor al mes siguiente.
Con ello, los restauranteros se vieron obligados a cumplir la prohibición oserían sancionados.
La prohibición ya se está transformando en una cultura de respeto por el espacio de los demás." Ángel Adame Jiménez, consejero nacional de la Canirac.
Por: ANTONIETA SÁNCHEZ / antonieta.sanchez@diariodemorelos.com