Rod Stewart y su hijo mayor, Sean Roderick, se declararon culpables por agresión a un guardia de seguridad.
El atentado ocurrió en un exclusivo hotel de Florida en las festividades de año nuevo del 2019. El artista y su hijo se declararon culpables de agresión simple, un cargo menor, a través de documentos presentados en la corte por su abogado, Guy Fronstin.
“Nadie resultó herido en el incidente y un jurado no encontró a Stewart culpable de la acusación. En cambio, Rod decidió presentar una declaración de culpabilidad para evitar las molestias y la carga innecesaria en la corte y el público que causaría un procedimiento de alto perfil”, indicó el abogado del artista, Guy Fronstin, en la BBC.
Ni el intérprete ni su hijo tendrán que comparecer en un tribunal ni habrá proceso de detención.
¿Qué fue lo que sucedió?
Los hechos pasaron la noche del 31 de diciembre de hace dos años, cuando Stewart y su hijo mayor, Sean Roderick, tuvieron una discusión con el guardia Jessie Dixon, que les negó la entrada a un evento privado en el lujoso hotel.
Según indican los documentos judiciales, Sean intento defender a su familia empujando al trabajador mientras que su padre le dio un puñetazo en el pecho. Ambos fueron arrestados y el intérprete se disculpó por su comporamiento en ese momento.
Se declaron culpables luego de que en octubre fracasara un acuerdo entre ambas partes, por lo que el británico y su hijo tenían una audiencia prevista para enero próximo. La oficina del fiscal estatal de Palm Beach, Dave Aronberg, que procesó el caso, declinó de hacer comentarios.