Guadalajara, México .-En una zona en la que la Policía de Guadalajara dice tener mucha vigilancia, los oficiales no sólo tardaron mucho en atender un reporte, sino que desalentaron a que se denunciara y hasta incitaron a la violencia.

 

 Eran las 21:00 horas del domingo pasado cuando una joven se reunió con un amigo en un establecimiento localizado en López Cotilla, esquina con Emerson, en la Colonia Americana.

Ambos llegaron en bicicleta. Ella la amarró a un poste y su amigo la recargó en una jardinera, aunque no la aseguró.

 Tardaron más en hacer sus pedidos que en lo que un hombre llegó para robarles el transporte.

 

 "¡Se están robando la bicicleta!", gritó ella.

 

El dueño reaccionó de inmediato, alcanzó al ladrón y lo tiró al suelo para someterlo. El criminal forcejeaba para escapar y lo hubiera hecho de no ser porque otros cuatro comensales ayudaron a inmovilizarlo.

 Uno de los que apoyó estaba especialmente molesto pues aseguró que días atrás su esposa fue atracada.

Los comensales llamaron al 911, le hicieron señas a una patrulla de Guadalajaraque estaba a una cuadra. Y nada. La unidad simplemente se retiró.

 

 "De estar en la esquina, nos ve pero se hace pato y se va rumbo al Centro", relató la joven.

 

Fue luego de alrededor de 40 minutos del reporte que por fin llegó la unidad 1094 de la Comisaría de Guadalajara. Finalmente se haría justicia. Estaban dispuestos a denunciar y pasar la burocracia necesaria con tal de tener a un ladrón tras las rejas. El sistema funcionaría esta vez, creían... Hasta que los policías empezaron a hablar.

Les dijeron que si presentaban una denuncia contra el criminal nomás iban a perder el tiempo y luego tendrían que asegurar la bicicleta en lo que se investiga y que de todos modos saldría libre y para qué hacerle al cuento.

 "El policía lo que nos dijo (fue) 'si quieren hacer justicia, mátenlo ustedes, ¿cuál es el delincuente que (no) vuelve a delinquir?, el que ya se murió'", aseguró la joven.

 

Los gendarmes les dijeron que mejor golpearan al ladrón sin denunciar.

 

Aunque al final se llevaron al sospechoso en la patrulla, les dieron a entender que lo soltarían en otro lado. Sólo les dijeron que el folio de su reporte era el 7425/1035. Los afectados querían justicia, pero sólo conocieron el coraje que da la impunidad.

Se buscó la versión de la Comisaría de Guadalajara, pero no hubo respuesta.

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