La policía investiga un terrible suceso ocurrido en Rusia, después de que una pareja adoptase a un perro en un refugio y que, poco después, cuando la protectora de animales quiso visitar al can, se encontró con un escenario macabro: la pareja había matado a golpes al animal antes de cocinarlo y de comérselo.
Tal y como explica el 'Daily Mail', el suceso salió a la luz después de que el personal del refugio decidiese visitar a Nika, una perrita "sociable y afectuosa"que había sido adoptada por dos "respetables" propietarios. Sin embargo, cuando acudieron a ver a Nika esa misma noche para ver si se encontraba bien, descubrieron que la habían matado para comérsela.
Ekaterina Valyus, voluntaria en un refugio dedicado al rescate de animales en Sakhalin, en Rusia Oriental, explicaba después que percibió que algo iba mal de inmediato: "Cuando llegué a la casa olí carne frita". Decidió investigar la casa de los nuevos dueños de Nika y descubrió pelo y sangre en el porche de la entrada, donde había una gran barra de hierro. Se fijó y notó que la sangre y el cabello manchaban el extremo de la barra.
Pocas horas antes, Nika había sido grabada en vídeo moviendo la cola y lamiendo amistosamente a la pareja mientras la acariciaban. Sin embargo, los voluntarios del refugio se encontraron salpicaduras de la sangre de Nika en la nieve del exterior de la casa, junto a un charco de orina que presumiblemente procedía de la indefensa perrita.
Dentro de la casa, se encontró un cubo con más restos de Nika, así como una olla donde presuntamente fue cocinada antes de comérsela. Aunque en un principio la pareja negó haber asesinado cruelmente al animal, la mujer, Galina, terminó confesando el crimen horas después ante la policía.
