A pesar de que una madre y su hija fueron privadas de la vida ayer por la mañana y que una casa fue quemada, el alcalde de Cuernavaca, José Luis Urióstegui Salgado, minimizó la ola de violencia que atraviesa la capital del estado, al asegurar que algunos hechos trágicos no son verdaderos y “son rumores”.
“Andan circulando muchos rumores, no tengo información al respecto, (…) Parte de los rumores hacen que la población esté desinformada”, dijo el edil al ser cuestionado sobre los asesinatos de madre e hija, ocurridos en la colonia Miraval, la mañana del martes.
También, sobre el incendio provocado en una supuesta casa de seguridad del crimen organizado, en la colonia Extensión Delicias, admitió desconocer las posibles causas, pues dijo que la Secretaría de Protección y Auxilio Ciudadano de Cuernavaca (SEPRAC) no cuenta con la información correspondiente y están a la espera de que la Comisión Estatal de Seguridad (CES) les brinde información al respecto.
“Yo preferiría que el secretario nos dé la información. Yo no tengo ningún dato”, externó.
A pesar de que la situación de la inseguridad en Cuernavaca cada vez es más crítica, Urióstegui Salgado dijo que no se incrementará el número de elementos de seguridad en Cuernavaca, ya que se deslindó de su responsabilidad argumentando que el alta de los policías depende de la Comisión Estatal de Seguridad.
Cabe resaltar, que ante la falta de seguridad en el municipio y la necedad del alcalde de no pertenecer al Mando Coordinado, algunos vecinos ya han expresado que realizarán “justicia por su propia mano”, como es caso de los habitantes de la colonia Carolina, donde una pastelería fue saqueada por dos sujetos la madrugada de este lunes y los elementos de la policía municipal nunca intervinieron.
Salvador Rosas / salvador.rosas@diariodemorelos.com