AHORA SÍ que Dios libre a Morelos del llamado “PIN Parental”, que en alguna otra entidad se ha pretendido aprobar en el marco de la armonización entre las constituciones estatales y la federal reformada. No, por acá con la entelequia del partido Morena, lo que ha jalado más es el ruido que causó la llamada “Ley Barbosa”, con la que en la vecina Puebla se abrió la puerta al agandalle estatal sobre la escuela privada. Vale, como sea, anotar aquí algunos apuntes de ambos temas para lo que se refiere a Morelos, pues dependiendo de cómo dejen la ley los diputados domésticos, sabremos a qué va la educación en el estado.
ESE TERMINAJO de “PIN Parental” significa que, por ejemplo en Nuevo León, la mini bancada del Partido Encuentro Social pretendía que los padres decidieran si se impartiría educación sexual y de género. Alias, que la contra-reforma Educativa federal de Andrés Manuel López Obrador abrió una laguna en la que cada entidad podría definir a su muy particular caso situaciones como la enseñanza sobre sexo y género. Obviamente, en una sociedad tan “mocha” como la generalidad de la neoleonesa, el mentado “PIN Parental” les vendría bien y es muy probable que los padres de familia le dieran para atrás a temas escabrosos.
ACERCA DE que las autoridades estatales le metan mano a la escuela particular, como tramó el taimado Miguel Barbosa para su molera entidad, la sola probabilidad incomodó a dueños de escuelas tlahuicas. Por acá, surgió la voz siempre clarificadora y conciliadora del doctor Matías Quiroz, quien en su calidad de líder del PRD en la entidad llamó a que no se fuera a aprobar en oscurito la armonización a la reforma. El galeno perredista dijo: “Es su obligación (de diputados) socializar y escuchar todas las voces a través de un parlamento abierto, para construir una nueva ley en el Estado de Morelos, evitemos las confrontaciones…”
OJALÁ TODO ajuste legislativo a la Ley de Educación equilibre los varios intereses que en la materia confluyen, pues sin uno solo de ellos el mayor perjuicio será para los que hoy se forman y son el futuro de Morelos.
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