HOY TOCA conocer el reporte oficial sobre la incidencia delictiva y no se esperan buenas noticias, no tanto por casos como el escandaloso atentado a una diputada local, sino porque en general la cosa está fea.

Decía “off the record” un mando policiaco de otra administración, palabras más, palabras menos: ‘basta un homicidio, secuestro o extorsión de alguien conocido para que explote la percepción social’.

Hoy, más allá de los casos de alto impacto mediático, la variedad de los delitos afectan en carne propia o muy cercana al grueso de la población. Hoy otra vez se añoran buenas noticias, sin embargo…

EL PUNTO más sensible de la Comisión de Derechos Humanos del Estado de Morelos no es tanto el nombramiento de su nuevo titular (quizá hoy), sino que en los hechos siga siendo un tiburón desdentado.

Hasta hoy el debate es si ha demorado el nombramiento, si debe ser mujer quien encabece la Comisión o si dos-tres “suspirantes” al cargo están más quemados que un judas en un soleado Sábado de Gloria…

Mas, el reto sería que esta CDHEM deje de ser oficina receptora de quejas, tramitadora de recomendaciones muchas veces ignoradas por inconsistentes y, sobre todo, que no sea trampolín del protagonismo.

TAL VEZ el Presidente López Obrador ya no debería insistir en aquello de que nadie gana más que él, como lo hizo en “la mañanera” de ayer, porque se infieren por allá y por acá risitas burlonas y extraños gestos.

Para no ir lejos en el mapa, dos-tres personajes de acá que absorben erario no pasarían la auditoría sobre su “salario”, definido así en la Ley del Trabajo no sólo para el ingreso base, sino incluidas las compensaciones.

Ahora que si le sumamos gastos de representación, comunicación, transporte y otras hierbas, resultan esos ingresos escandalosos que distan de la austeridad republicana y más aún de la pobreza franciscana.

PASA DE run-run a plan que legisladores de Morena quieren darle “copelas o cuello” al Consejo General del Instituto Nacional Electoral y a los Organismos Públicos Locales Electorales, incluido el Impepac. Vaya, cosa.

Por E. Zapata / opinion@diariodemorelos.com / Twitter: @ezapata1

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