A diario hay asesinatos atroces por todos los rumbos del País.
Tras tantos asesinatos,
a fuerza de ser sinceros,
clamamos sin arrebato…
¡Ya párenle carniceros!
Corolario: ¡Son miles los ultimados, desaparecidos, enterrados, encostalados, destazados, colgados, “pozoleados” y muchos más..!
Por PABLO RUBÉN VILLALOBOS