Durante la noche del 13 de abril, ocho personas fueron atacadas a balazos durante un tiroteo que la Policía de Chicago relacionó a la ola de violencia que se vive entre pandillas de la zona sur de esta ciudad en Estados Unidos.

Entre las víctimas hay una niña de siete años que lamentablemente murió tras recibir un disparo en la cabeza, mientras que un niño de un año y otro de siete, son reportados en estado grave de salud debido a los múltiples disparos que presentan en el cuerpo.

¿Qué se sabe de la balacera?

Según Don Jerome, número dos de la Policía de Chicago, el tiroteo sucedió en una zona residencial de la calle 52, cerca de la avenida Damen.

Fue ahí donde recibieron un reporte de detonaciones con arma de fuego a las 09:00 de la noche aproximadamente. La policía al llegar al sitio aplicó torniquetes y apósitos en las heridas de las víctimas, entre las que también había adultos de 19 y 40 años.

Jerome explicó que las personas heridas estaban en la calle en una reunión familiar, cuando los atacantes llegaron y les dispararon. Las víctimas fueron trasladadas a hospitales de la zona por los bomberos de Chicago, sin embargo, no pudieron auxiliar a tiempo a la pequeña de siete años.

¿Qué se sabe de los responsables?

La investigación sigue en fase inicial, pero de acuerdo con testigos, dos de los presuntos responsables fueron vistos caminando por la zona y aún no han sido detenidos.

“Esto no fue un acto aleatorio de violencia. Probablemente estaba relacionado con pandillas”, dijo Jerome.

El integrante de la Policía de Chicago asegura que los responsables serán detenidos, sobre todo, por involucrar a menores inocentes.

“Independientemente de la motivación para este incidente, tres niños inocentes fueron baleados anoche y una de ellas sucumbió trágicamente a sus heridas. No se equivoquen, las acciones de los agresores son espantosas e inaceptables en nuestra ciudad”, sentenció Jerome.

Recordar que los tiroteos en Estados Unidos lamentablemente son algo común. Incluso en las escuelas públicas es obligatorio el llevar mochilas y bolsas transparentes para que el personal de seguridad y maestros vean en todo momento con lo que cargan los alumnos. De esta manera buscan disminuir los ataques armados es escuelas, donde ya han sucedido varias veces y las víctimas mortales son numerosas.

Aunque se desconoce a ciencia cierta si dicha medida funciona o no, ya que estos hechos continúan en Norteamérica.

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