En México, la proporción de personas alfabetizadas mayores de 18 años que leen materiales como libros, revistas, periódicos, historietas o contenidos en línea ha mostrado una tendencia decreciente en los últimos años. Según datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), en 2024, el 69.6% de esta población declaró haber leído alguno de estos materiales, lo que representa una disminución de 14.6 puntos porcentuales respecto al 84.2% registrado en 2015.
Este descenso ha sido más pronunciado en los últimos años. Entre 2016 y 2023, la proporción de lectores pasó de 80.6% a 68.5%, evidenciando una reducción del 12.1% en ese periodo. Particularmente, entre 2022 y 2023, se observó una caída notable, sugiriendo que, tras un repunte en los hábitos de lectura durante la pandemia, estos han retornado a niveles previos.
La disminución en los hábitos de lectura es más marcada entre los hombres. En 2023, el 71.7% de los hombres reportó haber leído algún material, en comparación con el 65.7% de las mujeres. Sin embargo, al comparar con el año anterior, la reducción en la población lectora masculina fue del 4.4%, mientras que en la femenina fue del 2.2%.
Además, la cantidad promedio de libros leídos en un año también ha disminuido. Entre 2022 y 2023, los lectores reportaron un promedio de 3.4 libros leídos, una baja respecto al promedio de 3.9 libros del periodo anterior. Este promedio actual es similar al registrado en 2020, antes de la pandemia.
Frente a esta situación, expertos como Henoc de Santiago Dulché, director de la Feria Internacional del Libro de Monterrey, señalan la necesidad de una política articulada de apoyo al libro y la lectura en México. Destaca que, a pesar de esfuerzos aislados, la promoción de la lectura y la apertura de librerías han disminuido, y programas de apoyo previamente existentes han sido abandonados.
Los datos reflejan una preocupante disminución en los hábitos de lectura en México en la última década, lo que subraya la urgencia de implementar políticas públicas efectivas que fomenten la lectura y fortalezcan la industria editorial en el país.