LAS CRÍTICAS GRATUITAS
-Me acuerdo que a mi abuelito se enojaba porque colocaba su mecedora 10 o 15 centímetros de donde estaba la noche anterior; yo le decía que esa mañana había barrido el piso y al regresarla a su lugar no medí exactamente para ponerla como a él le gusta. Ese día estuvo enojado conmigo.
-Igual se disgustó cuando hicieron la carretera que dividió el corral y hasta la barda que pusieron no le gustó a papá porque ya no gozaba de la pestilencia de las vacas, ni que nos agrandaron la porqueriza; así cargábamos en el camión a los animales y no había que arriarlo por la vereda- mencionó la mamá recordando al abuelo en vida.
“No te enojes Carlita que también yo me disgusté cuando lo del ruido del Tren Maya al lado de la carretera, pero ahora con la estación a cien metros llevamos al ganado hasta la capital y con subir un metro más la barda tuvimos para amortiguar las obras, porque ahora que ya están trabajando, no se oye ni a qué hora pasa el tren,” exclamó Don Carlos.
NUESTRA CULTURA MAYA
-Además de que nuestra historia traspasara al estudiante, traerá turismo a las hermosas playas y a las grandiosas obras de nuestros antepasados Los Mayas. Por ahí está la carretera y a un lado pasará el tren- dijo Daniel el hermano.
-Sí pero se hicieron varias consultas entre los dirigentes de cada pueblo y todos aceptaron arreglarse con el gobierno, quién resolvió los problemas que el Tren podía acarrearles, pero quien sabe que pasó que los líderes de varios pueblos originarios comenzaron a ir a la Ciudad de México y hacer borlote frente a Palacio Nacional.
Mientras que otros líderes se vistieron con ropa de esas comunidades y sacaban amparos en contra de los constructores por razones desconocidas, explicó el papá, porque el presidente Andrés Manuel López Obrador no los quiso recibir y se los mandaba a Alejandro Encinas, para “arreglarse” y que les diera dinero a los líderes para retirar los amparos. Don Alejandro los citó para el 2025. Luego llegaban los “especialistas” en medio ambiente y organizaban plantones en las ciudades por donde iba a pasar el Tren Maya y la gente los abucheaba y los recibían con carteles diciendo que el gobierno ya no era igual y no caería en provocaciones y entonces los corrían.
LOS BENEFICIOS DEL TREN MAYA
-¿Y ahora de qué te quejas mamá si gracias a la llegada del tren tu hermano se regresó con toda la familia desde Canadá por la chamba que le dio la Constructora ICA en lo del Tren y ahora hasta casa propia tienen? No que antes sólo trabajaba unos meses en verano y en invierno se la pasaban aquí sin hacer nada.
-Pues hoy en día no falta quien acuse esa obra nada más para salir en los periódicos como un historiador Echenique comparó el trabajo del Tren Maya con los 14 proyectos que planeó Carlos Salinas de Gortari y que nunca llevó a efecto, pero quedó bien con el gobierno de España agradeciendo la conquista de los españoles, no como López Obrador que se anda peleando con los peninsulares y les dijo que pidieran perdón a los pueblos mexicanos por las matanzas de 300 mil indígenas que asesinaron durante los años de la conquista. Y todavía hasta acusa a López Obrador.
UNA VEZ TERMINADO EL TREN MAYA LO CRITICAREMOS
-A ver papá, ahora sí te interesan las obras alrededor del Tren Maya, donde hay cinco Parques Industriales y les están dando trabajo a miles de gente del sureste, ahora que Pemex ya está saturado y no han tocado nada de los centros ceremoniales Mayas, Toltecas y todos los demás pueblos históricos y la actuales culturas ancestrales.
Y por buena suerte encontraste el trabajo que tienes y el de tu cuñado, que puede laborar dentro de la nueva hidroeléctrica para que al final del río Usumacinta no se vaya toda esa agua al mar, si no que sirva para dar energía eléctrica a las industrias, a las comunidades y a las zonas turísticas, que son la principal razón de todo ese conjunto de fuentes de trabajo, ingresos para la población y también para los empresarios que vienen a invertir y poner su dinero para lograr las ganancias que les corresponde.
UN POCO DE HISTORIA
-Aunque hay gente que vive fuera de esta área sigue criticando la construcción de la obra, no se han dado cuenta que después de todos estos años, aún antes de la Guerra de Castas y luego de la explotación del henequén y de la intervención de Porfirio Díaz trayendo a casi toda la población Yaqui como esclava, el sureste de México estaba olvidado del centro y del norte del País, el este-sureste estaba completamente apartado y lo único que contaba era la venta de su henequén y desde entonces, pululaban los caciques, dueños de tierras y almas de las grandes haciendas que tenían como vecinos a los pueblos de Centroamérica y en especial a la Isla de Cuba.
Desde entonces a la fecha, sólo ha servido para extraer petróleo y después encontraron que el Mar Caribe era una mina de oro sin explotar. Se arregló un poco y no faltó el turismo que se le quitó a Varadero y a otros atractivos de Cuba. El Caribe fue redescubierto por los ingleses para la venta y traslado de hombres negros de África, como el gran negocio, vender en Estados Unidos, ya fuere por el caribe o por el Océano Pacífico a través de Acapulco, donde arribaron por ambas partes, 500 mil hombres negros y 200 mil que se quedaron en México, Cuba y por todas las islas caribeñas. Seguía contando.
Los negros que se llevaron a Estados Unidos fueron usados como esclavos por todo el País, pero el frio del norte no los dejaba trabajar bien y se fueron bajando hasta llegar al Cinturón Bíblico, que es donde están los “Blancos Anglo Sajones Protestantes” (WASP) quienes no se podían cruzar so pena de muerte y así, los negros tuvieron familias numerosas que aún viven en EE UU y en todo el caribe. De ahí que en México tengamos a nuestros Afromexicanos.
Todo cambio trae molestias, así se trate del Tren, como del nuevo baño dentro de la recámara, que se tiene uno que ir a dormir en la sala por un tiempo. Y hasta ahora que se tiene que pasar penurias por el ruido, etc., donde se afecta el medio ambiente que se va a reparar con nuevas siembras de árboles y plantas. Y así, con el Tren Maya, debemos esperar a que comience a funcionar y entonces criticarlo, porque ya no se puede cambiar.
Y parecido con los “segundos pisos” en la Ciudad de México, que fueron tan criticados ahora se están repitiendo. Así será el este-sureste con el nuevo Tren Maya que hará que el sureste, el centro y el norte de México se comuniquen. Y sin tantos peros, las obras lleguen a feliz término.
Por: Rafael Benabib / rafaelbenabib@hotmail.com