El presidente municipal de Jiutepec, Rafael Reyes Reyes, advierte que 2020 será el año más complicado en materia económica para los municipios, y lamentó que los poderes Legislativo y Ejecutivo se hayan negado a escuchar las solicitudes de apoyo que los alcaldes hicieron de manera previa a la emergencia sanitaria por COVID-19.

Este año, por ejemplo, el gobierno municipal sólo logró recaudar el 55 por ciento del Impuesto Predial correspondiente, y esto también abona al riesgo de una quiebra técnica que impida cumplir con los servicios públicos, agregó el edil.

Esta caída de la recaudación de ingresos propios, atribuible en parte a la pandemia del COVID-19 y a la crisis financiera que arrastran las familias del mal año que fue el 2019, se suma a la eliminación del cobro del Impuesto Adicional a partir de este 2020, y al hecho de que el municipio trabaja con la Ley de Ingresos del año pasado, debido a que el Congreso rechazó su iniciativa de Ley de Ingresos, como al mayor número de municipios.

A lo anterior, también se agrega la disminución de las participaciones federales en un 42 por ciento.

Rafael Reyes dijo que espera que estos recursos no disminuyan más en el año, pero es poco probable por el impacto que tendrá en la economía en general la emergencia sanitaria por el coronavirus. 

“Va a ser una hecatombe, y tristemente todo lo que pueda pasar, tendrá impacto en la población; eso fue lo que intenté transmitirle a los diputados y a los funcionarios del gobierno estatal, pero no quisieron escuchar”, agregó el alcalde al referirse a las negociaciones que llevó a cabo, previo al rechazo de la iniciativa de Ley de Ingresos para 2020.

Agregó que por el momento, Jiutepec mantiene el cumplimiento de los servicios públicos, pero no sabe si los recursos serán suficientes para todo el año. 

 

ANTONIETA SÁNCHEZ

antonieta.sanchez@diariodemorelos.com 

 

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