¿Que es la infidelidad?

La infidelidad en las relaciones de pareja es un fenómeno complejo que va más allá de simplemente engañar a una persona con la que se tiene un compromiso. Existen diversas perspectivas sobre lo que constituye una infidelidad. Algunas personas lo definen como cualquier contacto sexual con alguien que no sea la pareja establecida, mientras que otras lo consideran desde un aspecto emocional, como enamorarse de alguien más o romper los acuerdos mutuos sobre fidelidad. En este sentido, la infidelidad puede abarcar desde actos sexuales con otra persona hasta la inversión de energía emocional en otra relación.

Es importante no confundir infidelidad con deslealtad. La deslealtad implica acciones que van en contra de la pareja, como conspirar con alguien más para causarle daño, pero no necesariamente incluyen un componente sexual, por lo que no se clasifican como infidelidad.

Tipos de infidelidad
Se pueden identificar dos tipos principales:

  1. Infidelidad sexual: Implica la actividad sexual con alguien distinto a la pareja estable.
  2. Infidelidad emocional: Ocurre cuando uno de los miembros de la pareja desarrolla un vínculo emocional o amoroso con otra persona.

 

Motivaciones y patrones de infidelidad
Los motivos para ser infiel pueden variar entre hombres y mujeres. Generalmente, se dice que las mujeres tienden a buscar una conexión emocional con alguien más, incluso sin involucrarse sexualmente, mientras que en los hombres predominan razones sexuales por encima de las emocionales. Los expertos indican que entre un 70 % y 80 % de los hombres son infieles por motivos sexuales, mientras que en las mujeres esta cifra se reduce al 20 %.

Factores que favorecen la infidelidad
Existen múltiples factores que pueden propiciar la infidelidad, entre ellos:

  • Establecer cercanía o dependencia emocional con alguien que no sea la pareja.
  • Sentirse atraído sexualmente por otra persona.
  • Pasar mucho tiempo con alguien fuera de la relación.
  • Falta de conexión emocional con la pareja.
  • Estar en situaciones que ofrezcan oportunidades para ser infiel.
  • Consumo de alcohol o drogas, que disminuyen las inhibiciones.

En México, las estadísticas muestran que la infidelidad sexual afecta a un 30.6 % de los hombres y a un 12.8 % de las mujeres. Además, ser hombre triplica la probabilidad de cometer infidelidad sexual en comparación de la mujer.

Los celos no es una emoción irracional, puesto que, surge de una sospecha real o imaginaria de una amenaza a una relación que se considera valiosa. Ante los miles de casos que existen de infidelidad en México, no suena tan descabellado pensar en esta posibilidad. Este fenómeno es, sin duda, una muestra de la complejidad de las relaciones humanas y de los diversos factores emocionales, sexuales y contextuales que intervienen en su desarrollo.

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