En España salió a la luz información que demuestra que el FC Barcelona le pagó a José María Enríquez Negreira, del Comité Técnico de Árbitros de la Real Federación Española.

En LaLiga se ha desatado un verdadero escándalo, que vincula al Barcelona con los árbitros de la competición, luego de que se destapó que la directiva del equipo azulgrana le habría pagado dinero a José María Enríquez Negreira mientras fue vicepresidente del Comité Técnico de Árbitros de la Real Federación Española.

Las posible infracciones fueron cometidas entre 2016 y 2018, un periodo exitoso para los culés, en el que el club ganó dos Ligas y cuatro Copas del Rey. En este tiempo, hubieron situaciones polémicas respecto al arbitraje en los partidos del Barcelona.

Por ejemplo, el equipo catalán estuvo dos temporadas completas sin que le pitaran un penalti en contra (en un total de 76 jornadas consecutivas). Eso no es todo, pues en 2016 alcanzaron un récord histórico en Primera División: Le pitaron a favor 19 penaltis en una misma temporada, uno cada dos partidos. Incluso se vieron favorecidos en las expulsiones, con un saldo de 28-3 en ese tiempo, a favor del Barcelona.

En este tiempo, se le pagaron más de 1.4 millones de euros al directivo, quien alega que nunca favoreció al Barcelona en la cancha y que los pagos -sin factura- fueron por actividades de asesoría al club para decirle a los jugadores cómo se debían comportar con los árbitros.

Por toda esta situación, algunos aficionados y periodistas del futbol español han exigido que se castigue al club con una serie de graves sanciones, que podrían ir desde multas económicas hasta la pérdida de títulos, o incluso, el descenso de la primera división.

Ya se han dado las primeras reacciones de los directivos; por un lado, Joan Laporta, presidente del FC Barcelona, niega un conflicto de intereses, y asegura que los medios buscan desestabilizar al club por el buen momento que atraviesa.

Por otro lado, Javier Tebas, presidente de LaLiga, ha sido criticado duramente, ya que aseguró que no es posible que existan sanciones disciplinarias deportivas contra el club, ya que han pasado cinco años desde que se dio el pago, y este tipo de sanciones preescriben a los tres años de que se produzcan los hechos.

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