En un emotivo y vigilado regreso a su hogar, Jesús Murillo Karam, ex titular de la Procuraduría General de la República (PGR), salió del hospital para cumplir prisión domiciliaria en un inmueble ubicado en la exclusiva colonia de Las Lomas de Chapultepec. La medida se enmarca en los procesos legales que enfrenta por el Caso Ayotzinapa.

El traslado, iniciado alrededor de las 11:07 horas desde el penal de Tepepan, fue escoltado por un fuerte dispositivo de seguridad encabezado por la Guardia Nacional. Murillo Karam, en una suburban blindada de la Guardia Nacional, hizo su camino hacia su residencia, mostrando la gorra que llevaba puesta.

Luego de recorrer diversas zonas de la Ciudad de México, el convoy de seguridad llegó finalmente al domicilio en la calle Montañas Calizas, donde se solicitó a medios y vecinos alejarse del portón de acceso.

El emotivo momento de su descenso fue recibido con aplausos y lágrimas por parte de sus familiares, quienes ya lo esperaban en el interior de la casa. El ex funcionario, vestido de café y con la misma gorra que lo caracteriza, fue recibido con muestras de afecto y preparativos para su comodidad.

Ahora bajo la vigilancia continua de la Guardia Nacional y la Fiscalía General de la República (FGR), Murillo Karam enfrentará restricciones, incluyendo la prohibición de contacto con personas relacionadas con el caso y un registro de visitantes. Se determinó que medidas como el uso de un brazalete electrónico o la confiscación de sus bienes no serían aplicadas.

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