Cuernavaca.- El nombre de Emiliano Gutiérrez Cruz ya resuena con fuerza en el taekwondo nacional. Con 13 años, el peleador morelense conocido como “Trueno” se abrió paso entre la élite juvenil del país para colocarse como Tercer Lugar nacional en la categoría -49 kg cadete, en el Gran Slam 2025, demostrando carácter, técnica y temple frente a grandes rivales, en la justa hecha en Nayarit.
El representante de la escuela Guerreros Aztecas Morelos, originario de la colonia Ciudad Chapultepec, brilló en el Grand Slam, evento que reúne únicamente a los 10 mejores competidores del país. Ahí, Emiliano avanzó con autoridad tras vencer a Baja California, y en Semifinales protagonizó un combate de alto nivel ante un seleccionado mundialista de Baja California Sur, que se definió hasta el tercer round, cayendo solo por un punto.
Ese resultado le permitió colgarse la medalla de bronce nacional, una presea que no solo sabe a triunfo, sino que lo coloca entre la élite del taekwondo mexicano en su categoría.
Este resultado no es casualidad. Meses atrás, Emiliano ya había demostrado su calidad al conquistar medalla de oro nacional en Torreón, Coahuila, también en la división -49 kg cadete. Todo su crecimiento ha sido guiado por la tutela de su entrenador y hermano Alain Zuriel Gutiérrez Cruz, pieza clave en la formación del joven atleta dentro de Guerreros Aztecas.
Tras la competencia, Emiliano compartió sus sensaciones.
“Me sentí motivado, un poco nervioso, pero con la seguridad de dar lo mejor de mí”, declaró para Diario de Morelos.
Sobre lo que representa subir al podio por Morelos, fue claro:
“Siento felicidad y orgullo de poder representar a mi estado en eventos nacionales”.
El joven “Trueno” también dedicó su logro a quienes lo acompañan en cada batalla: su entrenador, su patrocinador, su escuela Guerreros Aztecas y, especialmente, a su familia, “por el apoyo y la motivación que me dan”.
Emiliano comenzó en el taekwondo a los 6 años, motivado por su hermano, quien hoy es también una de sus mayores inspiraciones. Para él, este deporte es más que competencia:
“Se ha convertido en parte de mi vida, guiado por la disciplina y la estrategia”.
Fuera del tatami, es un chico sencillo: le gusta el color azul, disfruta las enchiladas y encuentra satisfacción en entrenar y compartir lo aprendido con sus compañeros. Pero sobre la pista, su sueño es enorme y claro: ser campeón mundial y llevar el nombre de Morelos y de México a lo más alto.
