En esta ocasión nos acompañó la Clínica del Dolor, para resolver nuestras dudas sobre el reumatismo.
Reumatismo, Artritis y Dolor Articular: Causas, Síntomas y Cómo Abordarlos
El dolor en las articulaciones, a menudo asociado con el reumatismo, la artritis o la artrosis, es una preocupación común para muchas personas. ¿Son estos padecimientos solo "cosas de la edad"? ¿Influyen las emociones? ¿Cómo saber si un dolor es serio? Abordamos estas preguntas y más basándonos en la conversación con el Dr. Víctor Manuel García Catalán, especialista de la Clínica del Dolor.
¿Qué son las Enfermedades Reumáticas?
Es importante saber que las enfermedades reumáticas no se limitan a un solo padecimiento. De hecho, existen más de 200 tipos de enfermedades que caen en este grupo especial. Estas afecciones afectan principalmente a las articulaciones y a las estructuras musculares. Sin embargo, su complejidad radica en que también pueden afectar otros sitios, incluyendo órganos diana como los riñones o el corazón en casos más severos, como en la artritis reumatoide.
¿Son las Enfermedades Reumáticas solo Cosa de Edad? ¿Afectan a Jóvenes?
No, el reumatismo no es exclusivo de personas adultas. Si bien la edad es un factor importante en el diagnóstico diferencial porque los grupos etarios son relevantes para reducir el número de posibles diagnósticos, las enfermedades reumáticas pueden afectar a personas de todas las edades, desde la infancia hasta la edad adulta mayor. Un niño de 5-10 años no tendrá el mismo tipo de afectación que una persona de 60-65 años, aunque ambos puedan manifestar dolor en una articulación como la rodilla; la lesión se describirá de manera diferente.
Causas: ¿Hereditarias o Multifactoriales?
La pregunta de si el dolor articular o la artritis/artrosis son hereditarios es frecuente. La respuesta es que no son precisamente influenciados directamente solo por herencia. Son de causa multifactorial, lo que significa que no se limitan a ser solo hereditarias. Aunque algunos padecimientos tienen una gran carga genética o influencia hereditaria, esto no siempre es el factor determinante. Por ejemplo, el desgaste de rodilla tiene un factor hereditario, pero no es el determinante principal; situaciones como hábitos por actividad influyen más. En contraste, hay casos muy puntuales, como algunas enfermedades con herencia materna, donde la transferencia de genes causa directa.
Además de la genética y la actividad, el estilo de vida también puede influir.
Factores que Aumentan el Riesgo
Existen factores que pueden aumentar el riesgo de desarrollar enfermedades reumáticas. Uno de los más importantes destacados es el consumo de tabaco. El tabaco contiene una inmensa cantidad de sustancias, la mayoría carcinogénicas, pero también influyen en otros padecimientos. En la actualidad, se considera que el tabaco es una fuerte influencia para manifestar una situación que conlleve a una enfermedad.
¿Influyen las Emociones y el Estrés?
Sí, el estrés es bien importante porque influye en la calidad de vida. Situaciones como la tristeza o la depresión pueden llevar a un empeoramiento de los síntomas dolorosos. Una persona con dolor que también padece depresión puede ver cómo el dolor empeora, y viceversa, el dolor puede aumentar la depresión.
Señales de Alarma: ¿Cuándo el Dolor es Serio?
El dolor, especialmente el de espalda, es la causa más frecuente de ausentismo laboral. Un dolor puede considerarse serio o una señal de alarma en las siguientes situaciones:
- Cuando el dolor se vuelve incapacitante, impidiendo incluso levantarse de la cama.
- Cuando el dolor es intenso y perdura en el tiempo.
- Cuando el dolor se acompaña de otros síntomas como:
- Entumecimiento.
- Sensación de hormigueo en la zona del dolor o irradiado.
- Sensación de pérdida de fuerza en alguna extremidad (brazos o piernas).
La ubicación del dolor también es clave para el especialista. La columna vertebral se divide en regiones (cervical, torácica, lumbar), y la afectación en cada una orienta el diagnóstico. Un examen físico también busca signos superficiales como aumento de volumen o lesiones, y a mayor profundidad, tensión muscular o desviaciones vertebrales que puedan comprimir nervios, raíces nerviosas o la médula espinal.
El Espolón Calcáneo: Una Causa Común de Dolor de Talón
El dolor en el talón puede ser causado por un espolón calcáneo. Este se forma por un trauma repetitivo, como el microgolpe constante al caminar todos los días. Se genera un callito óseo, una formación nueva de hueso que a menudo toma forma de punta en el hueso del talón (calcáneo). Al pisar, esta punta lesiona las partes blandas (músculos) de la región, causando dolor intenso. Aunque es difícil de prevenir porque no se puede dejar de caminar, existen formas de manejarlo una vez diagnosticado.
¿Reumatismo es lo Mismo que Artritis?
Existen diferencias puntuales entre reumatismo y artritis, que idealmente debe aclarar un profesionista. De manera coloquial, para quien tiene la duda, la recomendación es preguntarle al especialista para obtener un correcto diagnóstico y abordaje de la situación dolorosa.
Hábitos que Aceleran el Desgaste Articular y Cómo Prevenirlo
Algunos desgastes articulares son muy frecuentes, como el de rodilla y el de cadera. La articulación de cadera se refiere a la unión del hueso de la cadera con la cabeza del fémur.
Si bien no podemos evitar completamente el desgaste natural que ocurre con el movimiento a lo largo de la vida, especialmente en relación con nuestras actividades diarias, empleos u oficios, sí podemos influir en el proceso. Los estilos de vida, una alimentación correcta y el control de peso pueden ayudar a disminuir o retardar algunos dolores articulares y repercutir positivamente en estas situaciones.
La Importancia del Movimiento
Contrario a la intuición, no se recomienda dejar de tener actividad física o de moverse para evitar el dolor, como en el caso del dolor de rodilla. Detener el movimiento puede llevar a que la rodilla siga desgastándose por procesos internos y, además, se pierda lubricación en la articulación, dificultando el movimiento posterior. En la mayoría de los casos, es fundamental que siga existiendo movimiento. Es crucial preguntar al médico sobre el tipo de reposo indicado (absoluto, relativo o ninguno).
Abordaje del Dolor y Tratamientos
El manejo del dolor es complejo y se basa en escalas de valoración para determinar su intensidad y el tipo de tratamiento adecuado. En el primer escalón del tratamiento se encuentran los analgésicos clásicos. Entre los más comunes están el paracetamol, el diclofenaco y el naproxeno, que pertenecen al grupo de los AINEs (Antiinflamatorios No Esteroideos).
Es importante ser consciente de los efectos secundarios de los AINEs. Los más frecuentes son a nivel gastrointestinal, aumentando el riesgo de sangrado en el estómago o intestino, especialmente si existen condiciones preexistentes como hipertensión arterial o gastritis. Existen otras opciones de medicamentos en diferentes escalones de tratamiento que el especialista considerará, siempre evaluando los efectos secundarios y el beneficio para el paciente.
No Vivas con el Dolor: Busca Ayuda Profesional
Muchas veces, las personas aprenden a vivir con el dolor, usando analgésicos o terapias temporales que solo calman el síntoma, pero la enfermedad subyacente persiste. Es fundamental no hacer del dolor una parte normal de la vida. Cuando el dolor se vuelve más urgente, a veces es demasiado tarde para evitar una cirugía.
La prevención y el tratamiento temprano son claves. Un especialista puede proporcionar un diagnóstico correcto y un abordaje adecuado de la situación dolorosa. La Clínica del Dolor, mencionada en la entrevista, se especializa en el manejo del dolor y busca evitar la cirugía siempre que sea posible.
Si experimentas dolor persistente o cumples alguna de las señales de alarma, acudir con un especialista es el siguiente paso lógico y necesario.