La adicción al teléfono celular se ha convertido en un problema tan mundial que incluso el Papa sopesó su gravedad este mes.
El Papa Francisco advirtió a un grupo de estudiantes de secundaria sobre esto durante una reunión en su escuela en Roma, según informó la revista católica América. El pontífice pidió a los adolescentes que "por favor, se liberaran de su adicción al teléfono", explicando que "cuando el teléfono es una droga", existe el peligro de que "la comunicación se reduzca a simples ‘contactos’".
El martes, el CEO de Apple, Tim Cook, estuvo de acuerdo.
A Cook se le preguntó acerca de cómo las personas comunes están usando sus teléfonos miles de veces al día durante una entrevista en el escenario en la Cumbre de Time 100.
El CEO estuvo de acuerdo en que muchos niños pueden estar usando demasiado sus teléfonos, y que este fue el ímpetu que impulsó desarrollar los informes de Tiempo de Pantalla de Apple, que se liberaron a los usuarios a principios de 2018.
Cuando se le preguntó acerca de un estudio que encontró que las personas, en promedio, tocaban sus teléfonos celulares 2,617 veces al día, él bromeó: "Ah, bueno, no deberías estar haciendo eso".
Explicó que la gente de Apple "no quiere que la gente use sus teléfonos todo el tiempo. Esto nunca ha sido un objetivo para nosotros" ya el uso constante del teléfono no es el modelo de negocio de su compañía.
Ese fue un ataque sutil a las aplicaciones publicitarias del mundo, como Facebook, Instagram, Twitter y Snapchat, que intentan hacer que la gente vuelva para interactuar más con sus plataformas para vender más anuncios.
"Está claro que hay ciertas aplicaciones que desean que la gente simplemente las use sin pensar y que continúen levantando sus teléfonos todo el día para ver qué sucede en este momento", dijo Cook.
También hizo eco de la evaluación del Papa sobre cómo los teléfonos dañan la comunicación.
Dijo que un cambio que la gente debería hacer es este: deja de prestar atención a tu teléfono en lugar de a las personas que están en la habitación contigo.
"Cada vez que agarras tu teléfono, significa que les está quitando la vista de la persona con la que estás tratando. Si estás mirando tu teléfono más de lo que está mirando a los ojos de alguien, ¡estás haciendo lo incorrecto!", dijo Cook.