La Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) volvió a encender las alertas de salud pública tras publicar una nueva entrega de su serie “Radiografía de productos”, en la que analizó la composición de unas conocidas galletas, revelando preocupantes hallazgos.
Según el análisis, las galletas Saladitas Gamesa — comúnmente usadas para acompañar alimentos — presentan un alto contenido calórico y de sodio, además de contener TBHQ, un aditivo cancerígeno usado como conservador. Este químico, según diversos estudios en animales, puede generar efectos tóxicos en el hígado y favorecer la aparición de tumores.
¿Qué encontró Profeco?
- Por cada 100 gramos de producto: 409 calorías.
- En solo 6 galletas pequeñas: 184 mg de sodio, equivalente al 9.2% del consumo diario recomendado para adultos y hasta el 12.6% para niños.
- Contiene jarabe de maíz de alta fructosa, uno de los endulzantes más dañinos para el cuerpo humano.
Aunque el empaque porta sellos de advertencia como “Exceso de calorías” y “Exceso de sodio”, Profeco advierte que el producto es nocivo si se consume en exceso, desmintiendo así su imagen publicitaria como “la mejor opción para acompañar tus alimentos”.
¿Qué es el TBHQ y por qué preocupa tanto?
Lo más inquietante del informe es la presencia de TBHQ (terc-butilhidroquinona), un conservador químico sintético que, aunque legalmente permitido en pequeñas cantidades, ha sido relacionado con efectos tóxicos en estudios realizados con animales.
Según la Profeco, el TBHQ es clasificado como un "antioxidante artificial", que no debe confundirse con los antioxidantes naturales (como los presentes en frutas y verduras). Este compuesto se ha vinculado con daños en el hígado, formación de tumores y otras alteraciones celulares cuando es consumido en altas cantidades y de forma frecuente.
Publicidad vs. realidad
Aunque las Saladitas Gamesa portan los sellos de advertencia correspondientes —como “Exceso de calorías” y “Exceso de sodio”—, Profeco señala que la imagen que proyecta el producto en su publicidad puede inducir al error. Se presenta como una opción ideal para acompañar comidas, sin revelar que, nutricionalmente, puede ser tan dañina como muchos snacks ultraprocesados dulces.
¿Qué recomienda Profeco?
Ante estos hallazgos, la recomendación es clara: moderar o evitar el consumo frecuente de estas galletas, sobre todo en niños y personas con problemas de hipertensión, diabetes o sobrepeso.
Como alternativas más saludables, se sugieren productos horneados con bajo contenido de sodio, sin azúcares añadidos ni conservadores artificiales.
