Durante la Ceremonia de Destrucción de Armamento Decomisado puesto a disposición de la Secretaría de la Defensa Nacional (SEDENA) se destruyeron 213 armas.
El Coronel de Infantería Diplomado de Estado Mayor Emilio Guzmán Almora, jefe de Estado Mayor de la 24/a. Zona Militar, informó que en esta ocasión fueron 146 armas largas, 67 armas cortas, 314 cargadores para cartuchos de diferentes calibres y 15 mil 843 cartuchos de diferentes calibres.
Explicó que estás armas son las que se ponen a disposición de los ministerios públicos, una vez que concluye el proceso de investigación se entregan a la Secretaría de la Defensa Nacional (SEDENA). De las 213 armas que se destruyeron dos procedía de la Fiscalía General del Estado y 211 de la Fiscalía General de la República, delegación Morelos.
“El Plan Nacional de Desarrollo contempla como una de las estrategias la construcción de la paz en todo el territorio nacional, por lo que dentro de la cultura de paz se considera como puntos esenciales la educación, la transmisión de valores y el comportamiento social para inhibir la violencia como forma para la solución de conflictos”, dijo el Coronel Guzmán Almora.
Destacó que la destrucción del armamento tiene como objetivo disminuir la posesión y la portación ilícita de armamento entre la población. Estás acciones ayudan a mantener la seguridad en la sociedad y la construcción de la paz como elemento esencial, fortaleciendo la tranquilidad y el bienestar de la población, además, repercutirá de manera positiva en el desarrollo del estado de Morelos.
“La disminución en la posesión ilegal de armas de fuego fortalece la seguridad e impulsa el desarrollo de toda nación, siendo una de las prioridades dentro del Gobierno Federal, encabezado por el presidente constitucional comandante supremo de las fuerzas armadas licenciado Andrés Manuel López Obrador, con la finalidad de que los mexicanos vivamos en un ambiente de tranquilidad”, dijo.
Destacó que con la inhabilitación permanente de estos objetos bélicos se evita un daño a la población, por ello este tipo de acciones son necesarias para frenar de manera contundente la violencia que actualmente afecta a la sociedad.
Durante su destrucción las armas son fragmentadas. Mientras que los cartuchos se inhabilitan al ser enterrados, con cemento y arena, para evitar uso.
Marcela García / marcela.garcia@diariodemorelos.com