Ciudad de México. – La Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) ha emitido un llamado urgente al Gobierno Federal, subrayando la necesidad de construir la propuesta de reducción de la jornada laboral con responsabilidad, diálogo social y plena conciencia de la situación económica actual. El organismo empresarial alerta que cualquier modificación unilateral a la Ley Federal del Trabajo podría desencadenar un aumento de la informalidad, una disminución de los empleos formales y el cierre de empresas, impactando de manera particular a micro y pequeñas unidades económicas.
Este posicionamiento surge tras el anuncio de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STPS) sobre la implementación paulatina de una reforma laboral que busca disminuir la jornada semanal de 48 a 40 horas. Aunque Coparmex reconoce avances laborales recientes como el incremento al salario mínimo, la ampliación de vacaciones y la reforma pensionaria, enfatiza que una transformación de esta magnitud no debe llevarse a cabo de forma precipitada.
El contexto actual del país presenta desafíos estructurales significativos. México atraviesa una marcada desaceleración económica. Además, enfrenta altos niveles de informalidad, que superan el 54.5% de la población ocupada, con cifras incluso mayores al 75% en estados como Oaxaca, Chiapas y Guerrero. La productividad laboral es baja, siendo la más reducida entre los países miembros de la OCDE.
Impulsar una reforma de esta envergadura sin abordar primero estos problemas podría generar el efecto contrario al deseado. Esto se traduciría en menos empleos formales y la consecuente precarización laboral, el debilitamiento de sectores económicos clave, cierres de empresas y, en consecuencia, una economía más frágil incapaz de hacer frente a los retos fiscales y al fortalecimiento de los mercados interno y de exportación.
Ante este panorama, el sector patronal manifiesta que no es el momento adecuado para decisiones unilaterales o imposiciones políticas. Insisten en la necesidad de construir soluciones integrales, involucrando a todas las voces relevantes: trabajadores, gobierno y empresas.
Para Coparmex, cualquier paso hacia una jornada laboral más corta debe venir acompañado de políticas específicas destinadas a fortalecer a las empresas formales. Entre las medidas que proponen se encuentran:
La deducibilidad al 100% de las prestaciones laborales, como incentivo a la formalidad.
La actualización de la tabla de subsidios al empleo (ISR), vista como una herramienta para facilitar el cumplimiento de nuevas obligaciones laborales.
La implementación de esquemas diferenciados por sector y tamaño de empresa, con el fin de evitar la aplicación generalizada de reglas que puedan perjudicar a aquellas organizaciones con menor capacidad para absorber costos adicionales.
Coparmex ha reafirmado su disposición a participar activamente en las mesas de trabajo convocadas por la STPS. No obstante, mantienen una postura firme: el diálogo debe ser auténtico y fundamentado en evidencia real.