Los murciélagos son animales asombrosos, habitan todos los continentes (a excepción de la Antártida) e históricamente, numerosos relatos míticos se han tejido en torno a su figura: conoce 5 datos sobre ellos.

Los murciélagos son sorprendentemente ruidosos

Para comunicarse a grandes distancias, un murciélago puede emitir un sonido tan fuerte como para registrar nada menos que 140 decibelios. Para que te hagas una idea, por ejemplo, en una disco, habitualmente hay unos 90 dB, mientras que en algún concierto en vivo se puede alcanzar los 110 dB y en casos muy extremos 115 dB. Además, el oído humano puede tolerar hasta 120 dB, desde allí se produce dolor físico.

Los murciélagos son los mejores en ecolocalización

Valiéndose de sus potentes cualidades sonoras, el sentido de la escucha y el eco rebotando en diversos objetos, los murciélagos logran localizarse de forma sorprendente. Ningún otro ser en la Tierra es tan bueno en la ecolocalización como lo son los murciélagos. Ello se debe a una serie de músculos “super-rápidos” que poseen, siendo los únicos mamíferos conocidos que los poseen y los cuales les permiten emitir potentes ondas de sonido más de 190 veces por segundo. El sonido golpea las cosas, rebota y vuelve hacia el animal. Su oído está tan desarrollado que esto literalmente les permite ver.

Algunos murciélagos comen más que sólo fruta e insectos

Algunas especies de murciélagos se alimentan de sangre y también de otros animales. El ejemplo más conocido por todos es el del murciélago vampiro, uno de los más interesantes debido a sus increíbles cualidades para la depredación, pero también tenemos algunas adaptaciones capaces de capturar peces para alimentarse. Aplicando sus complejos métodos de ecolocalización, pueden localizar a sus presas tan solo con las vibraciones del agua, bajando rápidamente en picada y haciéndose con un nutritivo alimento.

Los murciélagos son polinizadores fundamentales

Estas criaturas son fundamentales en la polinización y en la dispersión de semillas. Tal como ocurre con las abejas y muchas aves, estos mamíferos revolotean de flor en flor en busca de néctar, poniendo el polen en movimiento y también dejando semillas por todas partes al defecar. Numerosas frutas y vegetales realmente dependen de la ayuda de los murciélagos y además, son excelentes en el control de plagas.

 

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