Yautepec.- Tiene la garra de un Tigre. Desde Ixtlahuacán, Yautepec, una joven promesa del voleibol está dejando su huella en la cancha. Con 15 años, Sarah Itzel Carreola Nava combina talento, disciplina y determinación para defender los colores de Tigres de Yautepec, soñando en grande con llegar al voleibol profesional y brillar en las máximas competencias de esta disciplina.
La voleibolista, comenzó su historia en este deporte a los 12 años, cuando decidió unirse al equipo de Tigres.
“Entré al equipo para mantenerme activa y desde el primer día me encantó. Me gusta mucho la sensación de trabajar en equipo, animarnos mutuamente y celebrar cada punto juntas”, recordó.
Para Sarah, el voleibol es sinónimo de alegría, motivación y compañerismo. Su mayor inspiración es la idea de convertirse en una gran jugadora, mejorando día a día.
Entre sus mejores vivencias destaca un torneo nacional de voleibol de playa, donde compartió cancha con jugadoras de gran nivel. “Fue increíble ver jugar a tantos equipos y competir contra ellas. Me hizo querer seguir aún más en este deporte”, aseguró. “En voleibol de playa tuve la oportunidad de jugar con parejas mundialistas y eso me impulsa a querer lograr lo que ellas han conseguido”, agregó.
Con el apoyo incesante de sus padres, entrenadores y compañeras de equipo, Sarah entrena con la convicción de que el esfuerzo y la constancia son la clave del éxito. “Me gusta aprender, mejorar y nunca rendirme, porque creo que con esfuerzo y constancia se pueden lograr muchas cosas”, recalcó.
El camino de Sarah apenas comienza, pero con la garra de un Tigre y el brillo de sus sueños, su mirada ya está puesta en lo más alto del voleibol nacional e internacional.
Soy una persona dedicada que trata de dar lo mejor de sí en todo lo que hace. Me gusta aprender, mejorar y nunca rendirme porque creo que con esfuerzo y constancia se pueden logar muchas cosas.”
Sarah Itzel Carreola Nava, voleibolista.
