Medellín.- Un incidente ocurrido el pasado 15 de mayo en el barrio Belén, de Medellín, ha desatado una cadena de eventos que combinan autodefensa, crimen y venganza familiar, colocando a la ciudad en el centro de un debate nacional e internacional sobre seguridad, legítima defensa y desigualdad social. El dueño de un negocio local mató a un asaltante durante un intento de robo, y al día siguiente, los familiares del fallecido regresaron al lugar para lanzar piedras contra el establecimiento, argumentando que el joven era “el sustento” de su hogar.
Detalles del hecho
El 15 de mayo de 2025, alrededor de las 3:00 p.m., un joven identificado como Andrés Felipe Morales, de 24 años, ingresó armado a una tienda de abarrotes en el barrio Belén, según el reporte inicial de la Policía Metropolitana de Medellín. Morales exigió el dinero de la caja, amenazando al dueño, Carlos Alberto Gómez, de 42 años, y a una empleada presente en el lugar. En un acto de defensa propia, Gómez, quien poseía un arma de fuego legalmente registrada, disparó dos veces contra Morales, causándole la muerte en el acto. Las imágenes de un video, muestran el momento del forcejeo y el disparo, así como las secuelas del hecho, incluyendo la llegada de la policía y la reacción de los familiares al día siguiente.
El video, captura también cómo, el 16 de mayo, un grupo de aproximadamente cinco personas, presumiblemente familiares de Morales, regresaron al negocio y lanzaron piedras contra el frente del establecimiento, rompiendo ventanas y dañando la fachada. En las imágenes, se escucha a una mujer gritar: “Era el sustento de nuestra familia, ¿qué vamos a hacer ahora?”. Este acto de venganza ha sido condenado por las autoridades locales, pero también ha generado empatía en algunos sectores de la población, que ven en la desesperación de la familia un reflejo de las condiciones socioeconómicas precarias en muchas comunidades de Medellín.
En Medellín, Colombia, un comerciante defendió su local y abrió fuego contra dos ladrones que asaltaron su tienda, logrando abatir a uno de ellos
Al día siguiente, la familia del delincuente muerto regresó al lugar para lanzar piedras contra el negocio. pic.twitter.com/jTNuPG5vIJ— Extra de Morelos (@ExtraMorelos) May 21, 2025
Reacciones y debates legales
La acción del dueño de la tienda ha dividido opiniones. Por un lado, muchos ciudadanos y comerciantes han expresado su apoyo en X y Facebook, argumentando que actuó en legítima defensa para proteger su vida y la de su empleada. Comentarios como “Si no hubiera actuado, tal vez él o ella estarían muertos” son comunes en las redes sociales. Por otro lado, críticos señalan que la respuesta fue desproporcionada, y que existen protocolos alternativos para manejar situaciones de robo sin recurrir a la violencia letal.
Legalmente, la Fiscalía General de la Nación de Colombia está investigando el caso para determinar si Gómez actuó dentro del marco de la legítima defensa, tal como lo establece el Código Penal colombiano en el artículo 32, que permite el uso de la fuerza cuando existe un riesgo inminente para la vida o la integridad personal . Sin embargo, la investigación también incluye el análisis del acto de venganza por parte de la familia de Morales, que podría ser clasificado como daño a la propiedad privada y disturbios públicos, según el artículo 370 del mismo código.
Implicaciones para la seguridad ciudadana
Este incidente ha reavivado el debate sobre las políticas de seguridad en Medellín. La Alcaldía, a través de su Secretaría de Seguridad, ha anunciado un refuerzo en las patrullas en el barrio Belén y otras zonas comerciales vulnerables, según un comunicado del 18 de mayo de 2025. Sin embargo, activistas locales argumentan que estas medidas son insuficientes y que se necesitan programas de reinserción social y generación de empleo para abordar las raíces del problema,.
Internacionalmente, el caso ha sido cubierto por medios como BBC y Al Jazeera, que destacan la dualidad entre la legítima defensa y la desesperación económica, situando a Medellín en el contexto de ciudades latinoamericanas que luchan contra la violencia urbana.
Declaraciones de los involucrados
Gómez, en una entrevista exclusiva para el programa “Noticias Caracol” el 19 de mayo de 2025, afirmó que “no tuve otra opción. Era él o nosotros. No soy un hombre violento, pero en ese momento, pensé en mi familia y en mi empleada” . Por su parte, la madre de Morales, identificada como María Teresa López, de 45 años, declaró en una transmisión en vivo de Facebook que “mi hijo no era perfecto, pero era lo único que teníamos. Ahora, ¿cómo vamos a sobrevivir?” .