Diciendo lo que dijo el viernes en las redes, el presidente Andrés Manuel López Obrador le puso el cascabel al gato: “Esta es la información que recibí sobre contratos de Xóchitl Gálvez por alrededor de mil 400 millones de pesos en nueve años y que estoy enviando al señor Claudio X. González para su análisis y verificación. Aprovechando el viaje, desde la mañanera escenificada en La Paz, B.C.S., retó al titiritero de los conservadores, Claudio X. González, y a la organización Mexicanos contra la Corrupción y la Impunidad, “para que investiguen por presuntos actos de corrupción a Xóchitl Gálvez, senadora y aspirante presidencial del Frente Amplio por México”. Sobre el Instituto Nacional Electoral, que lo quiere callar, expresó: “Me quieren silenciar, no quieren que yo hable”. Preguntó: “¿Dónde quedan la libertad de expresión, el derecho de la réplica y el derecho a disentir? ¿Qué, no son principios básicos de la democracia?”. En esos momentos el Instituto Nacional Electoral no lo había sido notificado que tenía una mordaza, así que retó a Claudio y la organización Mexicanos Contra la Corrupción y la Impunidad para que den a conocer por qué la senadora Gálvez obtuvo contratos del gobierno federal cuando fue funcionaria pública en el gobierno del presidente Vicente Fox. Lo que advirtió podría ocurrir en la mañanera de este lunes, cuando el propio AMLO difunda los dichos contratos que involucran a Xóchitl Gálvez en un conflicto de interés. Antes de qué lo vayan a “cepillar” (callar), le pidió a Claudio que “apure la investigación sobre los contratos de Xóchitl, de su protegida, quien siendo funcionaria sus empresas recibieron contratos”. Reveló que le llegó una información en el sentido de que en nueve años Xóchitl tuvo contratos por cerca de mil millones de pesos. Y remachó con frases que en estos casos acostumbra: el que nada debe nada teme, la vida pública tiene que ser cada vez más pública, basta de simular. ¿Así o más clarito?..
GRACIAS al Congreso Estatal, este año la Universidad Autónoma del Estado de Morelos (UAEM) tiene un presupuesto con el 2.5 al 3.5 por ciento de aumento. De esta manera sintetizó el rector Gustavo Urquiza Beltrán la nueva situación de la UAEM, que, además de que podrá sufragar otros gastos, el ingreso de recursos extraordinarios le permitirá aumentar la matrícula en las carreras del área de salud, arquitectura y derecho.
Esté donde esté, en el extranjero o en México, otros vientos soplan en el refugio del exrector Alejandro Vera Jiménez. Lleva prófugo cinco años, y si no lo agarran es porque no quieren; lo protegen. Desde el 25 de marzo de 2017 sobre él pesa una orden de aprehensión relacionada con la causa penal JC/860/2017. Sucedió cuando no se presentó a la audiencia judicial fijada para nueve días antes, donde sería formalmente imputado por el dicho delito, así que la Fiscalía Anticorrupción solicitó a la juez Nancy Aguilar Tovar que fuera considerado un prófugo de la justicia susceptible de ser aprehendido por la Policía de Investigación Criminal. En el mismo ajo se halla Mario
Caballero Luna, el ex director del patronato de la UAEM y coordinador de asesores de la Lotería Nacional a la que metería en un problema de imagen la detención de Alejandro Vera. Según un resolutivo del Tribunal Federal de Justicia Administrativa emitido en julio de 2020, Vera está señalado del desvío de 239.3 millones de pesos mediante operaciones inexistentes como parte de la llamada “estafa maestra” en la cual fue involucrada Rosario Robles, quien luego de estar presa tres años en agosto de 2022 recuperó la libertad y recientemente que estuvo en Morelos el 1 de julio, tuiteó, demagoga, retadora: “Me reuní con mujeres morelenses. Escuché su dolor y su miedo pues #Morelos ocupa un ominoso tercer lugar en número de mujeres desaparecidas, sobre todo niñas. Les di las gracias por abrirme sus corazones. Unidas somos incansables, imparables e invencibles… (Me leen mañana).