Durante el desalojo de la Plaza Cívica de Tepoztlán, al menos tres funcionarios municipales fueron amenazados de muerte por comerciantes, uno de los cuales habría sacado un arma de fuego para intimidarlos. El alcalde Perseo Quiroz Rendón explicó que el operativo se realizó tras notificar previamente que el espacio es público y debía quedar libre.
Las amenazas fueron explícitas, como “te quedan dos días de vida”, señaló el edil, quien aseguró que las agresiones provinieron de un grupo de cinco o seis personas ya identificadas. Añadió que los trabajadores amenazados el pasado 15 de noviembre interpusieron las denuncias correspondientes y cuentan con medidas de protección. También rechazó que durante el operativo se hayan cometido agresiones o violaciones a derechos humanos por parte del personal municipal, y afirmó que las acciones emprendidas están “plenamente sustentadas”.
El alcalde informó que los comerciantes inconformes han promovido tres amparos, pero ninguno ha obtenido suspensión, por lo que el Ayuntamiento actúa “con plena libertad jurídica”. Reiteró que no se requiere una orden judicial para intervenir, al tratarse de un espacio público: “No es propiedad privada, no hay un derecho adquirido; el espacio público pertenece a la comunidad”, sostuvo.
Quiroz Rendón confirmó que la Plaza Cívica permanece desalojada y que así continuará. Indicó que entre ocho y nueve comerciantes aceptaron su reubicación y negó categóricamente que la administración pretenda privatizar el área o permitir la instalación de franquicias. Agregó que el Ayuntamiento mantiene diálogo con el INAH, debido a que la Plaza Cívica forma parte del catálogo de bienes culturales protegidos, y afirmó que se garantizará su preservación y uso exclusivo para actividades en beneficio de la población tepozteca.
