A medio siglo de su estreno, "La masacre de Texas" continúa siendo un referente en el cine de terror. A pesar de haber sido filmada con un presupuesto limitado y prohibida en varios países, esta película independiente ha dejado una marca indeleble en el género. Ed Neal, quien interpretó al perturbador "Hitchhiker", hermano del infame Leatherface, jamás imaginó que su participación en el filme se convertiría en una parte esencial de un fenómeno cultural que perdura hasta hoy.
La película, dirigida por Tobe Hooper, inauguró el subgénero "slasher" con su narrativa sobre un psicópata enmascarado que asesina a jóvenes desprevenidos. Leatherface, con su imponente figura de 1.95 metros, armado con una sierra eléctrica y un martillo, estableció el arquetipo para futuros asesinos cinematográficos como Michael Myers y Jason Voorhees. Josh Hazard, un fanático de 40 años, asistió al Texas Frightmare Weekend en Irving, vestido como Leatherface, y expresó: "Leatherface fue el primero. Creo que sentó un precedente sobre cómo serían las películas de terror".
Ed Neal, de 79 años, recordó cómo casi rechazó su papel tras leer el guion y las pocas líneas de su personaje. "Pensé que nadie la vería... y aquí estamos", reflexionó. La película se presentó como si estuviera basada en hechos reales, engañando a muchos espectadores. Neal recordó anécdotas con admiradores japoneses que creyeron que el filme era un documental real.
Desde su lanzamiento en 1974, "La masacre de Texas" se ha expandido en una franquicia con numerosas secuelas, precuelas y remakes, además de inspirar cómics y videojuegos. Ronnie Hobbs, director creativo de Art Interactive, lanzó un videojuego basado en la película el año pasado y destacó: "Ni las secuelas pueden capturar la fiereza y lo desagradable de la película original".
La trama de "La masacre de Texas" sigue a un grupo de amigos que cae en manos de Leatherface y su familia caníbal, quienes venden carne humana como embutidos y barbacoa. Solo Sally (Marilyn Burns) logra escapar. Jeanette Nolen, una fanática vestida como Leatherface, comentó: "Pudo haber pasado. Esa es la parte que más miedo da. Se sintió tan real".
La producción enfrentó muchas dificultades debido a su bajo presupuesto. Chase Andersen, director de operaciones de Exurbia Films, recordó que Gunnar Hansen, quien interpretó a Leatherface, tuvo que usar el mismo disfraz durante toda la filmación, resultando en un hedor insoportable. Los actores también llevaron las mismas ropas por semanas, y el sudor visible en la película es auténtico.
Teri McMinn, quien interpretó a Pam, protagonizó una de las escenas más emblemáticas del filme: la toma contrapicada mientras caminaba hacia la casa donde sería colgada en un gancho para carne. McMinn señaló que la violencia en la película es mayormente insinuada, lo que contribuye a su impacto duradero. "En aquellos años no hubo nada como eso. Fue prohibida en Francia por diez años, en Italia, en Suecia", recordó. "Esta película disparatada me ha llevado por todo el mundo", concluyó Ed Neal.
A pesar de las controversias y las prohibiciones, "La masacre de Texas" ha logrado trascender el tiempo, consolidándose como una obra maestra del cine de terror y un testimonio del poder de la creatividad frente a las limitaciones presupuestarias.