Para trazar un mapa de ruta conviene conocer el terreno y las condiciones por la que se va a transitar. Es el plan que nos permitirá llegar a nuestro objetivo de manera eficaz. Vale para lo familiar, lo personal, los negocios y aún más para el gobierno. Un buen diagnóstico permite tomar buenas decisiones.
Los planes estatales y municipales son instrumentos básicos para saber hacia dónde vamos y con qué y quién contamos. Con frecuencia son hechos bajo encargo a alguna agencia de consultores, para salir del paso que les impone la ley de planeación. Así se pierde la oportunidad de ser incluyente para que la población participe en la construcción de las estrategias destinadas ante los problemas sociales.
Los planes estatales y municipales deben ser evaluados, para saber si se está yendo por la ruta trazada o si nos apartamos del camino. Evaluar el camino andado es esencial. Nos permite corregir el rumbo.
El año 2022 es propicio para hacer un alto en el camino y valorar lo que hemos cumplido y lo que nos hace falta. Las desviaciones en que hemos incurrido y valorar las nuevas condiciones sobre las que esperábamos actuar.
El entorno político, económico y social del país ha cambiado. México atraviesa por una época llena de amenazas. La economía está lejos de crecer de acuerdo a las expectativas, y la pobreza se ha incrementado. La clase media está siendo sometida a fuertes presiones. La inversión no sólo no está como se esperaba y hay fuga de capitales. Salvan las remesas y que el dólar se mantiene relativamente estable. La pandemia no tiene fecha para irse y ha golpeado seriamente la economía del país junto con varios otros factores como la inflación , y la delincuencia continúa creciendo con rasgos cada vez de mayor crueldad. La austeridad federal impedirá la llegada de más recursos.
En lo interno, las cosas no se ven favorables. El gobierno del estado tiene abiertos demasiados frentes, entre los que sobresalen la criminalidad, la falta de empleo digno, el incremento en el costo de vida , la pandemia y los efectos globales en la economía popular. No hay inversión y el turismo está siendo duramente castigado. El cierre de una línea de Nissan es una señal preocupante.
La lucha interna en el Congreso dificultará la gobernabilidad al enfrentarse con el Poder Ejecutivo. La no aprobación del presupuesto 2022 es clara señal de alarma ,que reduce y dificulta la capacidad de movimiento del Ejecutivo.
El gobernador está siendo sometido a fuertes presiones, especialmente por la prensa nacional y en redes sociales. La fotografía que circuló la semana pasada posando con tres líderes criminales ha inquietado a la opinión pública. El asesinato del presidente municipal de Xoxocotla y las masacres del trienio, proyectan una inestable situación que hace frágil la paz indispensable para el crecimiento económico.
La agenda política estará marcada por el pleito entre los Fiscales y el Gobierno del Estado. Mutuamente se seguirán culpando del deterioro de la seguridad y los hechos violentos. La percepción de la corrupción seguirá creciendo. Los hechos violentos seguirán proliferando. No se advierte una estrategia correcta y visible que pueda mandar señales a la sociedad de que se camina por un rumbo correcto. Será un gobierno a la defensiva.
Los partidos en el gobierno, así como los de oposición, seguirán sin participar en el debate de los temas que inquietan a la población. Estarán enfrascados en sus conflictos internos por la sucesión del 2024. Los pre-candidatos seguirán calladitos. Es su manera de hacer política. La sociedad hará la labor de la oposición pero sólo en las redes.
La oposición no sabe ser oposición. Ante la opinión de la gente, simplemente no son nada. Su principal partido, el PAN, navegará tratando de evitar las aguas turbulentas que se avecinan y refugiándose esperanzados en que la figura del presidente municipal de Cuernavaca crezca y les cobije su sombra. (Entre una que otra zancadilla). El ayuntamiento de Cuernavaca enfrentará serios problemas para mantener el precario equilibrio entre las finanzas, la deuda y los deteriorados servicios. Además desde ahora, es el responsable de la seguridad pública y será sometido a severo y permanente escrutinio. Las expectativas son demasiado elevadas y enfrentará la crítica de la sociedad y el golpeteo de grupos políticos. El PRI seguirá cayendo en la opinión del electorado.
En contraste, a los tres años , el gobierno de Yucatán presenta buenos resultados en economía, seguridad y en el manejo de la pandemia. Francamente envidiable.
Por: Ariel Homero López Rivera