El estado de Morelos ha contribuido a nivel nacional en la generación de información técnica y científica para el control de las enfermedades transmitidas por vector, informó Eduardo Sesma Medrano, responsable de la Coordinación de Enfermedades Transmitidas por Vector y Zoonosis de los Servicios de Salud de Morelos (SSM).

Explicó que en los últimos años Morelos ha sido formador de recursos humanos y aliado del Instituto Nacional de Salud Pública (INSP) en diversos proyectos de investigación, así como pionero en la creación de Unidades de Investigación Entomológica y Bioensayo (UIEB’S).

Debido a que esta entidad es una región endémica del mosco transmisor del dengue, zika y chikungunya y año con año se registra una gran cantidad de casos, los SSM han priorizado la investigación para combatir a estos insectos.

Así que se cuenta con dos sedes del Centro Regional de Control de Vectores, una ubicada en la comunidad de Panchimalco, en Jojutla, y la otra en el poblado de Oaxtepec, Yautepec, en donde se realizan investigaciones para el control y combate de vectores.

Sesma Medrano comentó que en coordinación con áreas de Salud Pública realizan investigaciones operativas a través de las UIEB’S, “orgullosamente son de las primeras que se instalaron en el país, cuentan con personal capacitado que se encargada de colectar de las diferentes especies de mosquitos, entre ellos Aedes aegypti y Aedes albopictus en las que se analiza la dispersión y cuál predomina más, con la intención de determinar el riesgo para las localidades”.

ESTUDIAN LA RESISTENCIA

Una de las investigaciones que se realizan en las UIEB´S es la reproducción de moscos que son expuestos para las pruebas con insecticidas, “se pone en análisis los productos que se utilizan en condiciones habituales y se revisa si los mosquitos van generando resistencia a los productos, esto nos da la pauta de saber qué productos utilizar y que se tendrán un impacto en el control de las enfermedades transmitidas por vector”.

El especialista en vectores aseguró que con las diversas investigaciones que llevan a cabo la población puede estar segura de que los productos que se utilizan son confiables y están siendo utilizados de manera correcta.

Cada unidad cuenta con diversas áreas, como el Laboratorio de Bioensayo en donde se exponen los moscos a los diferentes insecticidas a través de diferentes de técnicas, “de manera aleatoria se exponen los moscos para ver qué efectos tienen, dependiendo de la cantidad de individuos que hayan muerto es el porcentaje de mortalidad que puede tener el producto, las pruebas se repiten hasta tener un resultado y evaluar lo que los proveedores entregan para validar los productos y seguir comprando”.

En el área del insectario se hacen madurar y reproducir a las diferentes especies de mosquitos, se tiene un sistema de vigilancia entomológica llamado ovitrampas que se colocan en diferentes puntos, los cuales se visitan cada semana y colocan papeletas para recolectar los huevesillos, se revisa cómo se van comportando las poblaciones de mosquitos y si hay algún crecimiento fuera de lo normal, en donde de detectar alguna irregularidad se dirigen las acciones de control de vectores hacia esa localidad.

Sesma Medrano destacó que las UIEB’s han permitido la formación de diversos especialistas de todo el país y ha contribuido a que este tipo de investigación se realice en otras entidades, como Morelos, que cuentan con las condiciones adecuadas para la proliferación del mosco que transmite dengue, zika y chikungunya.

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