Enero de 2025 marcó el inicio de una nueva generación, la cual promete ser la más digitalizada de la historia humana: la Beta.
Según expertos en demografía y cultura digital, este nuevo grupo incluirá a todas las personas nacidas entre 2025 y 2038 (aunque otros estudios extienden el rango hasta 2039) y se perfila como una de las más transformadoras del siglo XXI.
Su entorno: un mundo moldeado por la inteligencia artificial, el acceso permanente a la tecnología y una sociedad cada vez más interconectada.
¿Quiénes son los Beta?
La Generación Beta será mayoritariamente hija de los Millennials (Generación Y, nacidos entre 1981 y 1996) y de los miembros mayores de la Generación Z (1997-2009).
Según proyecciones demográficas, para el año 2050 esta generación representará el 18% de la población mundial, lo que refuerza su peso potencial en los cambios sociales, económicos y culturales del futuro.
El contexto generacional
Para entender mejor qué representa esta nueva cohorte, es útil repasar brevemente la cronología generacional que los precede:
- Generación Grandiosa (1901-1927): Vivieron la Gran Depresión y participaron en la Segunda Guerra Mundial.
- Generación Silenciosa (1928-1945): Crecieron en la reconstrucción posbélica, marcados por la disciplina y el trabajo duro.
- Baby Boomers (1946-1964): Nacieron en medio del auge económico y poblacional tras la guerra.
- Generación X (1965-1980): La primera en convivir con computadoras personales y presenciar el inicio de la globalización tecnológica.
- Millennials o Generación Y (1981-1996): Testigos del cambio de milenio, vivieron la transición del mundo analógico al digital.
- Generación Z (1997-2009): Nativos digitales que nunca conocieron un mundo sin internet.
- Generación Alfa (2010-2024): Primera generación del siglo XXI, criada con tecnología ubicua y sistemas de IA desde la infancia.
A diferencia de generaciones anteriores, que enfrentaron el auge tecnológico como una novedad, los Beta nacerán directamente en un entorno dominado por la automatización, la inteligencia artificial y la hiperconectividad.
Criados para un mundo digital... con límites
Una de las características más destacadas de la Generación Beta será su educación. Analistas apuntan que, al ser hijos de padres Millennials y Zetas —generaciones que han aprendido a convivir, adaptarse y a veces sufrir por la tecnología—, los Beta podrían recibir una crianza más consciente respecto al entorno digital.
Esto no implica una desconexión, sino más bien una integración inteligente: aprenderán desde pequeños a navegar el mundo hiperconectado con criterio, estableciendo límites saludables en el uso de pantallas, redes sociales y dispositivos. Serán, según los expertos, la generación del "equilibrio": entre la conectividad total, la necesidad de autenticidad y expresión personal.
¿Qué definirá a esta generación?
Aún es temprano para predecir con certeza qué eventos, tecnologías o movimientos culturales marcarán a la Generación Beta. Sin embargo, algo es claro: vivirán su infancia y adolescencia en medio de avances acelerados en inteligencia artificial, cambios climáticos severos, transformaciones en los modelos de trabajo, nuevas formas de educación híbrida y, probablemente, un mayor enfoque en la sostenibilidad.
“El carácter de una generación lo determinan los eventos y tecnologías de su tiempo”, señalan los demógrafos. Por ahora, el escenario está listo para que los Beta crezcan en un entorno que combina la sofisticación tecnológica con nuevas demandas de humanidad, empatía y conciencia social.
La Generación Beta no solo será digital desde el nacimiento, sino que también podrá decidir, como ninguna otra, el rumbo ético de las tecnologías que hereda. Habrá que esperar para ver cuáles serán los hitos que marquen su camino. Lo cierto es que su llegada ya está redefiniendo la forma en que entendemos el futuro.