Cuernavaca.- El obispo de la Diócesis de Cuernavaca, Ramón Castro Castro, lamentó que el cobro de piso y la violencia va en aumento en varios municipios de la entidad.
Monseñor Ramón Castro, también secretario general de la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM), aseguró que derivado de los hechos de violencia ocurridos en Coatlán del Río las misas y celebraciones religiosas se suspendieron por tres días, como medida de seguridad, para evitar que la gente saliera de sus casas.
“Los hechos de Coatlán y las balaceras de Puente de Ixtla han hecho que la gente este sumamente preocupada, por lo que hemos platicado con las autoridades quienes nos dicen que no hay policías suficientes y es difícil hacer frente a una situación tan grave. A esto se le suma el derecho de cobro de piso, hay familias que no denuncian, pero son víctimas de este tipo de delitos porque son amenazados”, declaró.
Recordó que, durante este año, al menos tres parroquias fueron saqueadas, el caso más grave fue en Cuautla, en donde el sacerdote fue golpeado, “el robo fue a plena luz del día, lo bueno es que hay una persona detenida por ese caso”.
Castro Castro aseguró que el tema de la violencia que se registra en las zonas sur poniente y sur de la entidad es consecuencia de la pelea de dos grupos rivales que se quieren apoderar del mercado y distribución de la droga, “es una pena, una tristeza y un dolor fuerte que todavía no exista un control de la inseguridad, quizás por benevolencia, miedo o deudas políticas hacia estos grupos”.
Consideró que la llegada de las nuevas administraciones en poco cambiará el clima de violencia, debido a que algunos grupos criminales podrían estar amenazando a presidentes municipales.
Aseguró que el delito de la extorsión también está creciendo, incluso, él fue víctima, ya que a su nombre solicitaron dinero en algunos monasterios, “llamaban por teléfono al monasterio y argumentaban que en el trayecto a una visita que haría hacia el lugar había tenido un incidente y necesitaba dinero, algunos sí cayeron porque vía telefónica finguían mi voz”, finalizó.
Por: Marcela García marcela.garcia@diariodemorelos.com