CUERNAVACA, MORELOS.- Emiliano Zapata Salazar fue un caudillo social siempre reconocido por su querencia a la tierra y su lucha por la gente del pueblo. Nació un 8 de agosto de 1879 en San Miguel Anenecuilco, municipio de Ayala, en la zona oriente de Morelos.
En el territorio morelense existen sitios e inmuebles importantes en la vida de El Caudillo, que a más de 100 de convertirse en leyenda, siguen relatando los ideales que le llevaron a ser impulsor de las revoluciones sociales más importantes del siglo XX.
Museo Casa Zapata
Fue el noveno de 10 hijos de don Gabriel Zapata y doña Cleofas Salazar y creció en una casa de adobe a orillas del río Ayala, tal como se observa en el Museo y Casa Zapata, ubicada en Anenecuilco, donde se observan las ruinas los restos de la casa construida hace más de 200 años por don Aniceto Zapata, abuelo de Emiliano.
En 1968, por Decreto presidencial, se construyó el Museo Casa Zapata, para contar la historia del caudillo y de su pueblo; en él se encuentra un gran mural con pasajes de la vida y obra del general, así como los motivos que lo llevaron a la lucha agraria y revolucionaria.
Zapata fue peón de campo, arriero de mulas, regador de tierras y excelente domador de caballos. Su vida cambió por varias causas, principalmente por el despojo de tierras a su padre y campesinos vecinos. Luego de ser elegido como representante de la defensa de las tierras de Anenecuilco, se convirtió en el principal activo de la lucha armada para beneficio de los pobres.
Ex Hacienda El Hospital
La primera rebelión y acto de liderazgo de Emiliano Zapata fue en contra los dueños de la Hacienda El Hospital, en la primavera de 1910; meses antes Zapata había sido elegido como representante de la defensa de las tierras de Ayala.
Tras el arrebato de las tierras a los campesinos de Anenecuilco por parte de los hacendados, en contubernio con el gobierno porfirista, El Caudillo formó un grupo de 80 hombres ‘mal armados’ y en las tierras del “Guajar” rompen las cercas, las mojoneras y Zapata empieza distribuir las tierras a los campesinos.
“Ese fue el primer brote de rebeldía de Emiliano Zapata frente a la Hacienda El Hospital, 8 meses antes de que empezara la Revolución, que posteriormente el 20 de noviembre iniciaría”, expresa el cronista Samuel Hernández.
Ciudad Ayala, Quiosco
Luego de que Emiliano Zapata se une a la Revolución, en el quiosco de Ciudad Ayala, en el año 1911 junto con varios coroneles y centenares de hombres, dieron lectura al “Plan de Ayala” para recalcar: “abajo las haciendas, arriba los pueblos”.
Parroquia de San José
Tras la muerte de don Fidencio Espejo Avelar, perteneciente al grupo de hacendados porfiristas y padre de Josefa Espejo Sánchez, la relación de noviazgo se formalizó con Emiliano Zapata, y en el mes de agosto de 1911, en la parroquia de San José, Zapata y Josefa se casaron, teniendo como testigos a Francisco I. Madero y su esposa Sara Pérez de Madero.
La Parota
El “árbol vivo de hechos muertos”, es otro sitio ubicado en la Villa de Ayala, este árbol gigante propio de la tierra caliente, sus gruesas ramas sirvieron para ahorcar a federales, porfiristas, maderistas, leonabarristas, huertistas y carrancistas, así como a traidores de Emiliano Zapata.
Hacienda de Coahuixtla
Un punto donde Zapata sostuvo combates contra las fuerzas federales es la ex hacienda de San Antonio Coahuixtla, ubicada en San Pedro Apatlaco, municipio de Ayala; fue construida en alrededor de 1580 por frailes Dominicos y después se amplió y surgió como uno de los mayores ingenios azucareros en el periodo del Porfiriato.
Para el tiempo de la Revolución Mexicana, Emiliano Zapata en su lucha y reparto agrario, toma la Hacienda en 1913 y la hizo su cuartel, para luego distribuir las tierras en 12 ejidos.
Pabellón Turístico Zapata
Otro inmueble importante en el municipio de Ayala, creado para ilustrar el proceso de la revolución social mexicana y la participación de Emiliano Zapata, esta obra actualmente se encuentra sin uso, pero forma parte de La Ruta de Zapata.
El Museo del Agrarismo
La Hacienda de Chinameca, hoy ‘Museo del Agrarismo’, a través de sus piezas narra la historia del siglo XX en Morelos y México, de la intención que personajes como Emiliano Zapata tenían por equilibrar una sociedad secularmente desigual.
Documentos, fotografías, piezas históricas y trapiches son elementos que se encuentran en este museo, que resume al Agrarismo como política de estado con el espíritu de la Revolución Mexicana de Emiliano Zapata.
Por: Guillermo Tapia / guillermo.tapia@diariodemorelos.com