El gobierno chino desmintió este jueves que existan negociaciones en curso con Estados Unidos para resolver el conflicto arancelario entre ambas naciones, contradiciendo las recientes declaraciones del presidente estadounidense, Donald Trump, quien aseguró que se estaban llevando a cabo conversaciones y que los aranceles sobre las importaciones chinas se reducirían sustancialmente.
En una rueda de prensa en Pekín, el portavoz del Ministerio de Exteriores de China, Guo Jiakun, afirmó que "no se han iniciado negociaciones ni consultas" y calificó las informaciones divulgadas por medios y fuentes oficiales estadounidenses como "falsas". Guo subrayó que la guerra comercial fue iniciada por Estados Unidos y reiteró que la postura de Pekín "siempre ha sido coherente y clara".
"Si se trata de luchar, lucharemos hasta el final; si se trata de hablar, la puerta está abierta", declaró Guo, enfatizando que cualquier diálogo o negociación debe basarse en la igualdad, el respeto mutuo y la reciprocidad.
Estas declaraciones se producen en un contexto de tensiones comerciales crecientes entre las dos mayores economías del mundo. Actualmente, Estados Unidos mantiene aranceles del 145% sobre las importaciones chinas, mientras que China ha impuesto aranceles del 125% en represalia. El conflicto ha generado preocupación a nivel global, y la Organización Mundial del Comercio (OMC) advirtió esta semana que la creación de bloques comerciales enfrentados entre EE. UU. y China podría hacer perder hasta un 7% del PIB mundial.
El portavoz del Ministerio de Comercio de China, He Yadong, también se pronunció al respecto, afirmando que Estados Unidos debe cancelar todos los aranceles unilaterales si desea reiniciar las conversaciones comerciales. He enfatizó que la responsabilidad de desescalar el conflicto recae en Washington, que fue quien lo inició.
Mientras tanto, el presidente Trump ha expresado su deseo de aliviar los aranceles en medio de preocupaciones sobre la inflación y la desaceleración económica. Sin embargo, Pekín ha mantenido su postura firme, insistiendo en que no hay negociaciones en curso y que cualquier diálogo futuro debe basarse en principios de igualdad y respeto mutuo.
La situación sigue siendo tensa, y la comunidad internacional observa con atención cómo evolucionan las relaciones comerciales entre Estados Unidos y China.

China niega negociaciones con EE.UU. sobre aranceles y exige respeto mutuo
