Como lo hemos tratado infinidad de veces en este espacio, reiteramos que la actual legislatura es de una mediocridad impresionante. Si la anterior fue una legislatura de ‘focas amaestradas’, buenas para llevar dinero a sus bolsillos y nada más, el Congreso de ahora en verdad no sirve para nada; la ignorancia de los legisladores y los pésimos asesores que pagan con nuestro dinero nos han dado miles de muestras de lo mal que lo hacen.
Creo que por esta vez ni siquiera han podido ser congruentes con el partido que los llevó al Congreso, la mayoría ha cambiado y brincado como ‘chapulines’ de partido en partido, para su conveniencia personal, y a la fecha no hemos visto un diputado que trabaje para los ciudadanos morelenses y menos aún para el distrito al que representa.
Hay quienes atacan de manera visceral a los diputados de partido o los plurinominales, lo que no tiene caso ya que la ley electoral no se puede modificar a medio proceso y, si bien es cierto que llegan muchos que no han alcanzado el voto popular y que sólo son representantes de partido, éstos se dieron con una razón política en su momento, y si no se está de acuerdo con ellos hay que presentar la iniciativa correspondiente a la Cámara de Diputados después de finalizado el proceso.
La situación es tan grave que nunca se pudieron juntar los 14 votos, de acuerdo a la ley, y ahora no se ponen de acuerdo para nombrar al sustituto del Frijolito que la presidió desde el inicio.
Mire usted: El Vicepresidente de la Mesa Directiva del Congreso, José Luis Galindo Cortés, aseguró que aún no existen los consensos necesarios para nombrar al nuevo Presidente del Poder Legislativo, por lo que, si existieran los consensos, apoyará a quien sea impulsado por la mayoría de integrantes del Congreso local. Tenemos a éste y al menos mediocre.
Y todavía continúa declarando –porque, eso sí, a los diputados no les para la boca y creen que dicen algo interesante- y aseguró que desde el pasado 12 de febrero él asumió las funciones de Presidente de la Mesa Directiva; sin embargo, comentó que no busca quedarse con dicho cargo sin el apoyo de sus compañeros diputados, quienes aún no llegan a los acuerdos necesarios para nombrar a quien ocupará el puesto que dejó vacante Alfonso de Jesús Sotelo Martínez. Pero no satisfecho, continuó diciendo: “Yo quiero dejar en claro que no estoy casado con ser el presidente, desde el pasado 12 de febrero asumí las funciones y por lo tanto haré la labor, pero si hay los acuerdos entre diputados para nombrar a un presidente, adelante; no voy a estar en este cargo a la fuerza porque no es mi interés, pero sí tengo el interés de hacer el trabajo legislativo”.
Habría que explicarle de la forma más simple que es interino y que sólo podrá ser presidente con el voto de sus compañeros, así de fácil. El diputado del Partido Encuentro Social agregó que, si la mayoría de los diputados impulsan la realización de una auditoría a la presidencia de su compañero de grupo parlamentario, para revisar cómo se encuentran las finanzas del Poder Legislativo, confía en que no haya ningún conflicto económico, ya que se han realizado diversos procedimientos de revisión de los recursos en los últimos meses.
Y, desde luego, aclara lo innecesario: “Debo decir que yo desde esa fecha en adelante soy el encargado de las finanzas, pero antes de eso el responsable es Alfonso de Jesús Sotelo Martínez, quien de acuerdo a la información que me han proporcionado, dejó unas finanzas sanas y las cuales ya han sido auditadas en diversas ocasiones y no se encontró ninguna irregularidad, pero sí hay diputados que quieren auditar la administración de Alfonso de Jesús, y si hay los acuerdos necesarios, estaremos viendo la posibilidad de que se realice una nueva revisión al ejercicio del diputado”.
Con esta capacidad “tan impresionante” él es quien está al frente de la legislatura; de esta manera podemos entender el porqué la Suprema Corte de Justicia de la Nación les da para atrás a todas sus resoluciones, la verdad es que dan pena ajena los diputados, que parecen todo, menos legisladores.
Por lo pronto ayer no hubo sesión pues aparte de incapaces son flojos y no se juntó el quorum por lo que no pudo haber sesión, pero pregunten en la quincena ¿quién deja de cobrar?, ninguno verdad.
Por eso, queridos amigos, tenemos que fijarnos muy bien en por quién vamos a votar, comprobando que cuando menos sean personas que para ser diputados tengan la capacidad de entender y modificar las legislaciones estatales, así como que sean capaces de tomar determinaciones de suma trascendencia para el Estado, como elegir a muchos de los funcionarios públicos, así como supervisar el gasto de los gobiernos estatal y municipales. Pero imagínense, si con las declaraciones que hacen se les nota el grado de ignorancia y mediocridad que tienen para desgracia de todos los morelenses, ¿qué se puede esperar de su trabajo?. Por eso hay que estar pendientes de por quién votamos, y que no sea por un partido, sino por las personas. ¿No cree usted?
Por Teodoro Lavín León / lavinleon@gmail.com / Twitter: @teolavin