Alicia Dávila Guerrero, responsable del Lactario del hospital general de Cuernavaca explicó que Morelos es una de las entidades que no cuenta con un Banco de Leche Materna, pero está en camino para instalarlo, el problema fue que la pandemia por COVID-19 detuvo el proyecto.
Explicó que la leche humana es el mejor alimento que deben recibir el recién nacido, pero desafortunadamente con el paso de los años se ha ido perdiendo el interés, lo que daña la salud de los bebés porque no recibien los anticuerpos ni las nutrimentos que produce la leche humana.
El hospital general ‘Dr. José G. Parres’ cuenta con un lactario que sirve de antesala para el banco de leche que está en la Ciudad de México, por ahora, en Morelos solo se puede recolectar leche y almacenarla por un periodo no mayor a quince días.
“Estamos trabajando para poder tener nuestro propio banco de leche. Es un proyecto que inició y se puede construir con recursos del Gobierno Federal, sin embargo, tuvimos que interrumpirlo tras la aparición del COVID-19l, declaró.
Lamentó que la lactancia materna se está perdiendo, lo que significa una grave afectación para la salud, ya que los menores no quedan protegidos contra virus y bacterias, por ello es necesario fomentar el uso de la lactancia materna exclusiva durante los primeros seis meses de vida, después se puede combinar con otros alimentos.
Dávila Guerrero, señaló que en Morelos es obligatorio que empresas y dependencias de Gobierno cuenten con un lactario, para que las mujeres puedan extraer su leche y ofrecerla a sus bebés.
Finalmente, dijo que el banco de leche permitirá recibir donaciones de este alimento, con la finalidad de que los pequeños hospitalizados o que por algún motivo no pueden ser alimentados por sus mamás puedan recibir este alimento. En lo que va de este año, el hospital Parres ha recibido cuatro donaciones de leche materna.
Por Marcela García / Marcela.garcia@diariodemorelos.com
