bichos

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Probablemente no lo sepas, pero ahora mismo decenas de criaturas microscópicas están escondidas en los poros de la piel de tu rostro, alimentándose del sebo que desprenden. Y por la noche, mientras duermes, pasa algo aún más perturbador: se dedican a perseguirse y aparearse aferrados a tus folículos pilosos, incluidas las pestañas.

Si por casualdiad pensabas que tu cuarto era un lugar aburrido en el que nunca pasa nada, no tienes idea de la 'fiesta' nocturna que te has perdido, incluidos hábitos sexuales poco ortodoxos.