El Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) alerta sobre la persistencia del suicidio entre niñas, niños y adolescentes de entre 10 y 17 años de edad, como un problema social que en números aumentó su tasa de 2017 a 2018, de 3.5 a 3.6 por ciento.
A propósito del ‘Día Mundial para Prevenir el Suicidio’, que se conmemora mañana 10 de septiembre de cada año, la institución indicó que en el año 2018, de un total de 705 mil 149 fallecimientos registrados a nivel nacional, 6 mil 710 fueron por lesiones autoinflingidas.
El mayor número de casos de fallecimientos se registraron entre la población de 30 a 59 años de edad, con el 46 por ciento; seguida del grupo de jóvenes de entre 18 a 29 años, con el 34 por ciento, y de las niñas, niños y adolescentes, de 10 a 17 años, con el 10 por ciento.
La estadística refiere también que son los hombres los que tienen una mayor tendencia a quitarse la vida, que las mujeres, con tasas de 8.9 contra 2, por cada cien mil personas.
Entre la población de 10 a 17 años de edad, el suicidio como causa de la muerte ocupa el cuarto lugar, después de las lesiones por accidentes de tráfico o vehículo; agresiones y tumores malignos, y antes de malformaciones congénitas.
Nueve de cada diez fallecimientos por lesiones autoinfligidas (88 por ciento), de niñas, niños y adolescentes de 10 a 17 años, fueron por ahorcamiento, estrangulamiento o sofocación.
El suicidio es definido por la Organización Mundial de la Salud (OMS, 2019) como un problema grave de salud pública, que tiene la cualidad de ser prevenible.
Pero, para ello, es necesario no solo atender los casos de depresión o intentos de suicidio, sino implementar estrategias para la detección temprana de posibles riesgos de suicidio.
Por Antonieta Sánchez / antonieta.sanchez@diariodemorelos.com