El Subsecretario de Protección Civil de Cuernavaca, Gonzalo Barquin, rememoró su experiencia durante el sismo de 1985.

“Un día como hoy, pero de 1985, perteneciendo al Comité de Juventud de la Cruz Roja, listos para salir de la guardia nocturna en el área de ambulancias, se me pidió que siguiera apoyando ya que muchos compañeros y la mayoría de unidades acudian a la Ciudad de México para sumarse a las actividades de rescate y salvamento generadas por el gran sismo.

“Eran como las 14:00 horas cuando se nos solicitó acudir apoyar a la capital del país, ya que la magnitud del evento requería de todos. No recuerdo el lugar ni cómo llegamos, ya que todo era desolación angustia tristeza e impotencia; sólo recuerdo que ya cayendo la noche, mi compañero Carlos Ramírez (QPD), responsable de la escuadra me dejó cuidando nuestra unidad”, recordó.

El funcionario agregó que “pasaron  algunos minutos y entre llantos y gritos un niño se acercó a mí en toda esa obscuridad y me pidió con voz llorosa y lleno de tristeza que le ayudara a sacar a sus papás que estaban debajo de aquellos escombros. No recuerdo muy bien cómo fue, solo lo abracé y le dije: “todos los que estamos de aquí los vamos a sacar...”.

Staff Diario de Morelos

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