Phos-Chek, un retardante de llama utilizado en la lucha contra incendios, es producido por la empresa Perimeter y ha sido un recurso clave en la protección contra incendios forestales desde 1963 en Estados Unidos. Este producto es el principal retardante de fuego utilizado por el Departamento de Silvicultura y Protección contra Incendios de California y, según un informe de 2022 de Associated Press, también es el más utilizado en el mundo.
El color del producto, inicialmente brillante, se desvanece a tonos tierra después de unos días de exposición al sol, ayudando a los pilotos y bomberos a visualizar las áreas tratadas en el terreno.
El uso de Phos-Chek en la lucha contra incendios se realiza principalmente mediante aeronaves, que descargan entre 1.000 y 1.500 litros sobre áreas afectadas por las llamas. Sin embargo, debido a las altas temperaturas, este producto puede evaporarse rápidamente, especialmente en condiciones extremas como las que se viven actualmente en Los Ángeles, con sequía, viento y bajas humedades.
El Servicio Forestal de EE. UU. explica que los retardantes de fuego como Phos-Chek ayudan a ralentizar la propagación de los incendios al enfriar y recubrir los combustibles, reducir el oxígeno disponible para el fuego y disminuir la velocidad de combustión. A pesar de sus beneficios, existe una restricción sobre su uso en áreas sensibles del medio ambiente, como ríos y hábitats de especies en peligro de extinción. Sin embargo, se permiten excepciones cuando la seguridad pública o la vida humana están en riesgo.
Phos-Chek continúa siendo una herramienta vital en la lucha contra los incendios forestales, aunque su eficacia está sujeta a las complejas condiciones climáticas y la rapidez con la que los productos pueden evaporarse en áreas de alto calor.