LLENA DE razón y hasta sobrada está la secretaria estatal de Economía y Trabajo, Cecilia Rodríguez González, cuando dice que esta entidad no debe depender tanto de los recursos federales para logar el desarrollo.
No lo dijo, pero valdría precisar que el Estado de Morelos se mueve con recursos públicos en un 85 provenientes de la Federación y un 15 restante de recaudación propia. Las cuantiosas remesas es otro cantar.
El gran problema es que si la Federación marca un apretón de cinturón como viene para 2020, las expectativas de desarrollo se desdibujan. Encima, impera la queja social y dicen que somos del Estado de “Norelos”.
DE PRONTO, una estudiante de la UAEM se levantó de su butaca y preguntó a la vocal de la Junta local del Instituto Nacional Electoral su opinión del apretón de recursos del gobierno de AMLO a ese instituto.
La diputada local Tana Valentina Rodríguez (PT) aprobó la pregunta adicionada en que López Obrador pretender cooptar los organismos autónomos o ahorcarlos financieramente como parece ser este caso.
La vocal Refugio García hizo una mueca de incomodidad, pero le entró al toro: todo lo que hace el INE es la mejor respuesta frente a quien le apretó el presupuesto y, evidentemente, va por más y más “autónomos”.
AHORA ES cuando, en el Congreso doméstico, podría brotar alguna muestra de voluntad para acabar con la parálisis que ha dominado al Legislativo por el voluntarismo e interés particular de algunos grupos.
Alias, una vez más se espera que alguien con los intereses particulares menos inflamados que los de las mayorías halle un punto de interés común y/o alguna divisa de negociación para destrabar los trabajos.
La experiencia, aquí y allá, es que no debe haber un grupo uniforme, sino pesos y contrapesos, que aún con sus diferencias tengan por común denominador los intereses de los diversos grupos de la sociedad.
Y SI no se ha dicho la última palabra del paquete económico 2020 para Morelos, pues se puede detener el “reloj legislativo, lo cierto es que la amenaza de golpe fiscal está latente y toca ver de qué están hechos los diputados.
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