DE FONDO, el comercio ambulante de nuestro entorno es la alternativa general a dos tipos de carencia: la laboral, para el vendedor, y la de satisfacción, para el comprador; en ello finca su persistencia y fortaleza.

Es innegable que la oferta laboral se queda corta frente a la demanda, ya no sólo la simple oportunidad de trabajar en tal o cual empresa, sino también para acceder a un salario que satisfaga las necesidades.

Por otro lado, a menudo el comercio formal no satisface al potencial comprador por razones de precio o sencillamente por la dificultad de encontrarlo fácilmente. El ambulantaje juega a la oferta y la demanda.

RECIÉN LA semana pasada el Ayuntamiento de Cuernavaca emprendió acciones para retirar a comerciantes ambulantes de la banqueta frente al Hospital General Regional No. 1 en la conocida avenida Plan de Ayala.

Se trata de una práctica irregular de hace décadas pero que al paso del tiempo los comerciantes argumentan legalidad y hasta derechos, lo cual supone un nuevo choque de intereses y quizá prolongada lucha.

¿Quién le dio permiso y derechos a los ambulantes y por qué? Se sabe que ellos representaron un atractivo recurso con fines electorales en los tiempos que el PRI se ostentaba como aplanadora… lo demás es historia.

EN VARIOS momentos y lugares diversas autoridades han intentado erradicar o contener al comercio ambulante, por cierto, con magros resultados; los gobiernos son trienales o sexenales, el comercio, eterno.

El que la actual administración del Ayuntamiento Cuernavaca haya emprendido acciones con los ambulantes de Plan de Ayala es loable, sin duda, pero vale no albergar expectativas que pueden ser endebles.

Tal vez de manera temporal las banquetas de este y otros sitios puedan limpiarse de informales, pero se antoja que más tarde que temprano habrán de volver por permisos o amparos de viejos tiempos.

SI YA no como clientela electorera, por ser opción para extorsión de funcionarios públicos o por demanda social, el comercio ambulante parece imposible de erradicar en tanto no cambie la ecuación de su origen.

Por: E. Zapata / opinion@diariodemorelos.com / Twitter: @ezapata1

Cumple los criterios de The Trust Project

Saber más

Síguenos en Google Noticias para mantenerte siempre informado

Sigue el canal de Diario De Morelos en WhatsApp