EL 4 de junio, el gobierno de la CDMX de Claudia Sheinbaum amagó con que a partir de enero del año 2020 se prohibiría la circulación a los vehículos de Morelos y de otras entidades en la capital de la República.
La intención causó preocupación a muchos conductores de Morelos por la cotidiana movilidad hacia esa urbe, que les estaría cerrada de 06:00 a 11:00 horas los martes, miércoles y jueves, aparte de los días habituales.
Obvio, se dio un rechazo inmediato del gobierno morelense, por la unilateralidad de la medida, surgida en la desesperación de la jefa de gobierno de la CDMX ante los altos niveles de contaminación en esas fechas.
RECIÉN SE dijo en Morelos que se atacará la intención del gobierno de la CDMX, de restringir allá la circulación de vehículos tlahuicas, con la queja de que se violentaría el derecho constitucional al libre tránsito.
Mala cosa si va a ser ese el argumento más contundente con que se siente Morelos a la mesa de la Comisión Ambiental de la Megalópolis (Came), porque se infiere la falta del consejo de los jurisprudentes.
La Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos aborda el citado derecho en su Artículo 11, pero no es tan simple como que todo mexicano puede ir y venir por todo el país sin más que su voluntad…
LA CARTA Magna dice: “Toda persona tiene derecho para entrar en la República, salir de ella, viajar por su territorio (…) sin necesidad de carta de seguridad, pasaporte, salvoconducto u otros requisitos…”.
Pero, dicen, los que dicen que saben, que los objetos o bienes no son sujetos de derechos, sino las personas, que se les debe garantizar el pleno ejercicio de ésos. Alias, el Artículo 11 no es para los vehículos.
Entonces, ir a negociar con Sheinbaum y la Came con la exigencia de respeto al 11 constitucional del libre tránsito o topar en tribunales, como que difícilmente cuajaría. Hay tiempo para rediseñar el plan.
TAL VEZ cuaje mejor preguntar en qué porcentaje contribuyen los vehículos con placas de Morelos en la contaminación que padece la Ciudad de México. El origen y solución al problema es cosa suya.
Por: E. Zapata / opinion@diariodemorelos.com / Twitter: @ezapata1