POR AMOR, de Dios o de quien quieran, ojalá esta vez sí sea la buena en cuanto a contar con un registro vehicular público que contribuya a inhibir la comisión de delitos, claro, si se aprueba el reemplacamiento.
El caso es que allá por 2013 se dio la promesa de que las matrículas metálicas de los “patas de hule” iban a tener impreso código de barras o QR para que lectores ópticos en calles detectaran a los mal portados.
Todo pasó, menos la concentración y uso práctico del registro de los vehículos, que hoy sigue dado pie a que se use todo tipo de unidades para cometer delitos, sin que se tengan datos confiables y útiles.
POR AMISTAD no, sino sólo porque no hay necesidad de tanto brinco, siendo el piso parejo, aparece una respuesta a la versión de que andan a salto de mata dos-tres ex personajes de la administración pasada.
Cuenta el “affair” que un ex funcionario de Obras Públicas anda por algunos comederos de Cuernavaca sin amparo bajo el brazo, por el momento, confiado en que no tiene cola que le pisen los judiciales.
Alias, que presumiblemente no se le puede achacar que haya tomado algunos centavos no eran suyos, so pretexto de la reconstrucción de inmuebles que resultaron dañados por el sismo del 19 de septiembre de 2017.
SI NO pleno, al menos tipo “crush” (en neo acepción juvenil) empieza a verse la relación entre los poderes Legislativo y Ejecutivo, que habían estado distanciados pero últimamente ya no se hacen el feo abiertamente.
Diríase que la necesidad de echar adelante el paquete económico 2019 los hace encontrar afinidades y probablemente una vez que se apruebe puede venir una etapa de entendimiento y camino juntos de la mano.
No por nada febrero es el mes del amor y la amistad, por lo que estaría que ni pintado que en lo que resta del mes ya se aclararan paradas y vayamos todos juntos por los nuevos logros para Morelos.
QUÉ MEJOR acto de amor por la UAEM que el de los sindicalizados académicos de la UAEM que contienen su necesidad de alza salarial para ayudar a la salud financiera institucional. Quién más dice ‘esta boca es mía’.
Por E. Zapata / opinion@diariodemorelos.com / Twitter: @ezapata1