Mucha gente se da cuenta que la situación económica en el hogar anda muy mal porque ya no alcanza para nada. Lo mismo le pasa al vecino que a los amigos, pero cuando se ponen a platicar casi todos están de acuerdo en que el culpable es el presidente municipal, el gobernador del estado o el presidente de la república.
Así todos están de acuerdo porque uno opina que el presidente municipal no ha arreglado las calles ni ha enviado a la policía a que cuide su colonia. El otro menciona que lo que pasa es que el gobernador pierde el tiempo atendiendo asuntos de inversiones extranjeras, mientras que el tercero señala que el culpable de que la economía ande mal es el presidente que se entretiene cuidando a los campesinos y a los estudiantes, pero a la clase media los tiene olvidados. El problema es que todos tienen razón porque los sueldos, los pacientes y las ventas en los negocios andan por los suelos.
El licenciado Parra de la Fuente, profesor en economía de la UNAM comentó que el problema no es tanto de México, sino que los asuntos de falta de dinero intervienen factores externos de otra índole, como la guerra comercial entre los Estados Unidos y China, la cual es indirectamente la culpable de que las finanzas no estén funcionando.
Pero eso qué tiene que ver con mi clínica o qué la gente ya se dejó de enfermar o sólo por eso se aguantan el malestar porque los grandotes se están dando de trancazos, perdonen pero me da pena decirles que durante el día de ayer no tuve ningún paciente, se quejó el doctor Gómez Landa.
La gente se sigue enfermando y ahora van a ver al médico de la farmacia que no les cobra y compran yerbas para beber o para untarse porque no les alcanza ni para el doctor ni para la medicina de patente o la de similares, ya que ni buenos laboratorios tenemos en México, y hay que importar todos esos medicamentos.
Y así le preguntaron el por qué ya nadie les compraba ropa, “tenemos ropa de marca y a muy buen precio” o “no he encontrado chamba por ningún lado” mientras que el peluquero se quejó que ahora las señoras ya le cortaban el pelo a sus maridos para no gastar.
El problema de la guerra económica entre estas dos potencias es responsable que las medicinas gringas sean más caras, que la tela de Malasia casi se regale y las fábricas de textiles de México estén como cuando Salinas y su Tratado de Libre Comercio que los empresarios perdieron su capital mientras muchos de ellos se fueron a la quiebra. Cosa que no les pasa a los chinos; ellos fabrican sus propias máquinas, refacciones, su acero está a la mitad de precio del mexicano, así como el aluminio y son quienes tienen una tecnología tan importante como la de Estados Unidos.
Y así, para vender toda la mercancía que no le compran los asiáticos, los estadunidenses hacen la guerra en Venezuela, Perú, Bolivia, Ecuador, Chile y en otros países de Latino América, Cuba y otras islas del Caribe. Irán Corea del Norte, Siria, etcétera.
Sólo les faltaba México, donde tienen a cientos de agentes de la DEA, CIA y FBI, con los que Trump quiere intervenir junto a sus marines a nuestro País para “librar una guerra sobre los cárteles de la droga y borrarlos de la faz de la tierra”. “¡Sólo esperamos una llamada de su gran nuevo presidente!”, expresó Trump en uno de sus tuits.
El ciudadano de México está extrañado que a últimas fechas se han presentado muchas casualidades, como el asunto de Culiacán y el hijo del Chapo, el asunto del general Demetrio Gaytán en la SEDENA frente a 500 generales criticando sin mencionar el nombre del presidente, la labor de su gobierno que sonó a golpe de estado. Y ahora, las declaraciones intervencionistas de Trump a México a perseguir cárteles dentro de nuestro territorio, disque para defender a una familia de nacionalidad mexicana y estadunidense, que fue atacada y ultimada por delincuentes sin más motivo que robarles una camioneta. Lo que suena más como un acto electorero que a una amenaza, pues ya sabe cuál sería la respuesta del gobierno de México de “No intervención y la defensa de nuestra Soberanía.
Pero lo del general Gaytán , fue una abierta insubordinación hacia el Jefe Máximo de las fuerzas armadas que se prestó a toda clase de conjeturas por parte del Presidente Andrés Manuel López Obrador. “Todos tenemos derecho de expresarnos”, comentó el Primer Magistrado.
¡No, no es el derecho a expresarse!, sino que él como general del Ejército está doblemente obligado a respetar a sus superiores, prácticamente amenazó al Ejecutivo de cambiar todo lo que se había hecho en beneficio de su País, esté o no en retiro porque de ninguna de las dos formas se puede hablar así, pues lo que está proponiendo un general que propició la guerra contra las droga en tiempos de Felipe Calderón, que costó miles de vidas sin ningún provecho. Este no es sino un golpe de estado tipo Pinochet, Hitler, Huerta y Franco, el que pondría a todo México dentro de una nueva y más sangrienta revolución que la de 1910.
De cualquier manera al asunto de Culiacán, la intervención del general Gaytán Ochoa y el deseo intervencionista de Trump, han logrado que el pueblo de México respalde más al Presidente Andrés Manuel López Obrador, porque además de estar con él por todos los programas que está llevando a cabo, casi no existe alguien que no se haya visto beneficiado con dichos programas o se verá, y nadie quiere estar envuelto en una asonada militar que se sabe estaría impulsada por los gringos (porque en cualquier conflicto armado, ellos son los que ordenan) y cuando estemos peleando, ellos entrarían con cualquier pretexto “a salvar la democracia” y jamás los sacaríamos de nuestro País.
Todo esto para cuidar los intereses de los traficantes de drogas y de armas. Las unas de uso exclusivo para la clientela estadunidense y las otras para seguir matándonos entre hermanos, como lo hizo Calderón con su estúpida guerra contra el pueblo, digo, contra el narco, en beneficio de los que quieren invadir y seguir medrando con la pobreza y dignidad de los mexicanos, regresando al tiempo de la corrupción y de la impunidad contra la población mexicana.
Trump está muy calladito contra los mexicanos que viven allá porque quiere sus votos, si es que llega a las elecciones y no lo sacan con un juicio político por traidor a la patria o lo meten a la cárcel por haber evadido impuestos durante veinte años.
Ustedes están hablando de guerra, del respaldo que los mexicanos le hemos entregado al Presidente Andrés López Obrador y yo tengo la esperanza que con el nuevo presidente de Estados Unidos nos vaya mejor y se olvide de los planes intervencionistas contra los mexicanos, terminó el licenciado Parra de la Fuente.
Va de cuento
Rafael Benabib
rafaelbenabib@hotmail.com