Para celebrar un año más de vida y deleitar el paladar con un menú italiano, Ana Salafranca acudió a un restaurante de la ciudad junto a sus mejores amigos, quienes comparten en común los gustos de la festejada.
Ana agradeció a todos los asistentes por estar con ella en este día tan importante y disfrutaron los ricos platillos como pizza y pastas, acompañadas de vino tinto.
Durante su estancia hablaron acerca de futuros viajes que realizarán a diversas partes del país, con el propósito de conocer más acerca de la cultura de otras localidades y, a la vez, reforzar su amistad.
Para cerrar con broche de oro la tarde, los invitados entonaron las tradicionales Mañanitas a la cumpleañera, quien también recibió lindos obsequios, abrazos y palabras de felicitación.