En las últimas horas se viralizó un fascinante video de un caracol que exhibe varios colores en su cuerpo transparente, como si tuviera resortes en su interior.
Para muchos usuarios de redes sociales, el caracol parecía estar haciendo algo “bonito” con sus antenas, pero en realidad, este animal había sido infectado por un parásito y éste se había apoderado del cerebro del caracol.
Les dejo este caracolito que es más bonito que leer tanto racismo en Twitter. pic.twitter.com/01Smlimfqn
— OXLACK INVESTIGADOR (@OxlackCastro) August 11, 2019
¿Un caracol zombie? Tal es el efecto que produce un parásito conocido como Leucochloridium paradoxum, un gusano capaz de controlar las funciones motoras de los caracoles que habitan en los bosques de Norteamérica y Europa.
Los inquietantes movimientos de colores que vemos adentro de las antenas es en realidad el parásito manipulando el cerebro del caracol.
El parásito manipula el cuerpo de su huésped y lo obliga a trepar una planta o el tronco de un árbol. El objetivo del parásito consiste en que el caracol sirva de carnada para que un ave se lo coma.
Al ser digerido por un pájaro, el parásito se reproduce en el estómago y deja sus huevos en el intestino. Éstos son extraídos junto al excremento del ave, los cuales, a su vez, son consumidos por los caracoles en el piso.
Después de un tiempo, nuevos parásitos nacen en el interior del caracol, se desarrollan y así procede el ciclo de Leucochloridium paradoxum. En efecto, no es nada “bonito”.