México necesita la ayuda de todos los ciudadanos. Tenemos que estar bien informados de los peligros por los que nuestro País está pasando. La lucha contra la delincuencia, la corrupción, la explotación y el robo de nuestros recursos no parece tener fin. Los que estaban acostumbrados a llevarse los bienes de la Nación no quedaron satisfechos con todo lo que se robaron sino que siguen intentando por todos los medios, de continuar surtiéndose de nuestro pueblo.
La ciudadanía debe estar al alba de los ataques que está sufriendo el País, como el robo de los hidrocarburos, los ataques contra el nuevo plan educativo, la emigración, los gobernadores molestos sin el control del dinero; seguir atacando a la cultura y a la historia nacional, la lucha contra la corrupción y la injusticia, el miedo que metan a la cárcel a los líderes corruptos si les quitan el fuero.
Cuando Andrés Manuel López Obrador llegó a la jefatura de gobierno de la Ciudad de México, nadie creía que fuese a hacer de la capital de la República, una de las ciudades más adelantadas con cambios positivos iba a volverse el antiguo Distrito Federal. Pero así sucedió. Él recibió el reconocimiento la UNESCO y de la OMS como uno de los más avanzados alcaldes del mundo.
Ahora que fue electo por la gran mayoría del pueblo como presidente de México, los políticos que mangonearon lo que quisieron durante 80 años, creyeron que el cambio iba a ser moderado y no les iba a afectar en mayor medida, a pesar de haber prometido, cuando era candidato, un cambio totalmente distinto del que hasta ese momento existió.
Sabemos que el pueblo está del lado del presidente, que se ha visto con buenos ojos el haberles retirado la jubilación a los presidentes anteriores, que estamos ganando el pleito contra los huachicoleros, que no se engancha en la pelea que anda buscándole Trump para tratar de ganar las próximas elecciones presidenciales en EE UU y entre otras cosas, el haber defendido, en el caso de Venezuela nuestra soberanía, enarbolando la bandera de la “no intervención”.
Pero el que el pueblo se dé cuenta de que está siendo atacado por todos lados sin mediar las fatales consecuencias contra el País, como el que la oposición se una para rechazar todo lo que el Presidente Andrés Manuel López Obrador presenta, como por ejemplo: quitarles el fuero a los integrantes de los poderes Ejecutivo, Legislativo y Judicial, incluyendo al mismo presidente; y que la corrupción, el lavado de dinero, la trata de blancas y el robo de hidrocarburos se conviertan en delito grave sin derecho a fianza.
Porque el ser oposición dentro del gobierno no quiere decir negarse a todo lo que el presidente presente como propuesta, en beneficio de la educación, lo que traería como resultado el diálogo, el reconocer los errores, remediarlos y que la ley sea aceptada por el Congreso. El Secretario de la SEP Esteban Moctezuma ya está estudiando el asunto como una reforma laboral según el Artículo 37 y va a continuar como debate en la Cámara.
En cuanto al problema en Michoacán nadie sabe dónde se quedó el dinero que se supone el gobierno anterior lo entregó al gobernador Silvano Aureoles y éste a los profesores.
Los maestros de la CNTE se pusieron en huelga y al no encontrar respuesta, bloquearon las vías del ferrocarril. El gobernador no intervino ni tampoco alguna otra autoridad. El presidente López Obrador tuvo que dar órdenes de que se les diera un primer pago a cuenta, que los líderes de los maestros aceptaron. El problema estaba resuelto.
Se comenzaron a levantar los obstáculos de las vías, pero de pronto aparecieron otros grupos junto a diferentes líderes quienes se volvieron a apostar en las vías del tren y después comenzaron a cerrar el paso del tren por varias vías por la ciudad, sin la intervención de ninguna autoridad estatal o municipal, pues el gobernador dijo que al obstruir las vías, ese ya se convertía en un asunto federal.
La Fiscalía ya llamó a los 15 líderes de la CENTE, a causa de una demanda penal que la compañía dueña del ferrocarril levantó contra la sección 18. Aún ahora, el gobierno Michoacano se niega a intervenir.
De igual forma está el asunto de los migrantes que vienen de Centroamérica de manera muy peculiar. Un enviado de Peña Nieto estuvo con los presidentes de Honduras, Guatemala y el Salvador a hablar con un enviado de Trump. Poco después se organizaron las salidas de los migrantes de los tres países hacía Estados Unidos a sabiendas que ahí no los iban a dejar entrar, por lo que continuaron hasta la frontera norte
Trump los ha satanizado y los llamó “delincuentes mexicanos” a los que tenían que detener con su famoso muro, declarando ante el Congreso de EE UU, que iba a llamar a 35 mil soldados a la frontera, además de los 25 mil que ya están. ¿Más que en Afganistán? ¿Con motivos electorales o amenaza de intervención con cualquier pretexto?
Está en huelga la UAM, cuyo sindicato pide un aumento del 20% el cual sería imposible dar, ya que el tope en todas las universidades es de 3.5%no se podría dar más que el 3.5% ya que el resto de las universidad. Si les dieran más, todas las universidades querrían lo mismo. Parece que la UNAM ya quiere hacer una huelga.
La formación de la Guardia Nacional necesita 17 coordinaciones regionales, explica el Secretario de Seguridad Alfonso Durazo, quien pide que con urgencia acepte sobre la Guardia Nacional. El motivo que se está presentando, es que se está militarizando al País.
Las amenazas y los actos contra nuestro País continuaran mientras se sigan atacando los intereses de las administraciones pasadas, ya que por lógica estos son cómplices de los delitos que se acostumbraba a hacer durante esos sexenios y por más que el presidente apure a la Cámara de Senadores a que se libere ese asunto lo más pronto posible, la oposición continuará con su cerrazón.
Ahora esa misma gente está organizando marchas de los antiguos antorchistas que jamás han sabido cuáles son sus peticiones, a los transportistas de compañías privadas, cuyos problemas son de tipo laboral, pero los ponen a cerrar las calles con sus transportes, a la propuesta de dejar de perseguir a los cabecillas de la droga y usar a la Guardia Nacional para desmembrar a la delincuencia organizada, su enojo porque el dinero de los programas sociales ya no van a pasar por sus manos, sino que irá directamente a los interesados como son los adultos mayores, los niños, los discapacitados, a las estancias y a los becarios sin poderlos tocar.
Están las huelgas en las maquiladoras orquestadas desde el exterior, haciendo a la gente creer que están cerrando por culpa del gobierno.
Total, que México está en peligro porque los afectados, no quieren perder el poder y seguir con lo de antes. Pero no cuentan que todo México está unido y no se los permitirá.
Por: Rafael Benabib / rafaelbenabib@hotmail.com