A continuación, te explicamos qué son los NEO.
Un asteroide podría impactar la Tierra en septiembre de 2019
Objetos como cometas y asteroides, atrapados por la atracción del Sol o los distintos planetas, pueden pasar cerca de nuestro planeta, son los llamados NEO, Near Earth Object (objeto próximo a la Tierra).
Existen diversos tipos de NEO. Los meteoroides son objetos con un diámetro menor de 50 metros; mientras que los cometas con un periodo orbital menor a 200 años y que están cercanos a la Tierra son llamados NEC (Near Earth Comets); finalmente los asteroides son conocidos como NEA (Near Earth Asteroid) conforman la mayoría de los NEO y, a su vez, se subclasifican en tres grupos, según su radio orbital: medio, perihelio y afelio.
Por otro lado, los NEC y NEA cuya distancia mínima de intersección orbital con la terrestre es de 0.05 unidades astronómicas o menos y tienen una magnitud absoluta de 22.0 o más, se denominan respectivamente cometas potencialmente peligrosos (PHC, por sus siglas en inglés) y asteroides potencialmente peligrosos (PHA).
Existen programas internacionales de detección y catalogación de los NEO encabezados por Estados Unidos, Rusia, Francia y Australia, son conocidos como Spaceguard Survey y constan de una red de telescopios pertenecientes a centros astronómicos y universidades de todo el mundo.
Pese a esta red que suele padecer serias limitaciones presupuestales debido a que no es una prioridad para los distintos gobiernos en el mundo, solamente conocemos una fracción de los NEO. De acuerdo con información de la Gaceta UNAM, hay 500 mil de estos objetos en el Sistema Solar con un diámetro de entre 30 y 100 metros, además existen unos 40 mil que miden entre 100 y 300 metros.
Según la publicación de la Universidad Nacional Autónoma de México, el impacto de un NEO en la corteza terrestre podría ocasionar efectos catastróficos a escala global, tales como suspensión de polvo que oscurecería la atmósfera de la Tierra, lo que provocaría cuantiosas muertes de vida vegetal, así como lluvia ácida; además de tsunamis.
El ejemplo más conocido de un NEO es aquel de 10 kilómetros que chocó en la Península de Yucatán y presuntamente provocó la extinción del 75 por ciento de las especies animales y vegetales del planeta.